Dentro de tanto dolor, es un milagro que seis personas hayan sobrevivido. Una de ellas es Ximena Suárez, azafata de la aerolínea Lamia, que es quien se encuentra en mejor estado de salud. Según aseguran los reportes clínicos, su posición aerodinámica logró el milagro de la salvación. De hecho, fue pasada de urgencias a una habitación y ahí entregó las primeras declaraciones de los pasajeros que vivieron el terror del accidente.
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El gobernador de Antioquia, Luis Pérez Gutiérrez, fue el encargado de transmitir las palabras de esta azafata, que poco recuerda sobre lo que sucedió en el vuelo de la aerolínea Lamia.
“Las luces se apagaron y no recuerdo más hasta ahora”.
Suárez también habría agregado que el avión tenía combustible suficiente, pero que el piloto decidió deshacerse de él para evitar una explosión, en el momento de la colisión, aunque esto todavía no ha sido confirmado oficialmente. Se espera que en las próximas horas de mayores declaraciones y se pueda dilucidar qué sucedió en el avión.
