0 of 5
PUBLICIDAD
Cortes de pelo, bromas o burlas. Ese es el proceso al que todo nuevo jugador de un club de fútbol debe someterse para ser considerado parte del plantel. El llamado ritual de iniciación ya es una tradición en los equipos y más vale someterse a lo que decidan los miembros más antiguos del plantel, sino las consecuencias pueden ser peores.
Al menos, así quedó en claro con la iniciación que le hicieron a Granit Xhaka en Arsenal. El nuevo refuerzo de los Gunners fue sometido al ritual y sus compañeros lo hicieron pararse en una silla para cantarle a todo al plantel en medio de una de las comidas que comparten en la pretemporada.
Sin opción de negarse y sabiendo que sería un vergonzoso proceso, al suizo no le quedó alternativa y demostró que sus dotes están en el fútbol y no en el canto. Notoriamente incómodo con la situación, el jugador de 22 años empezó cantó en su idioma natal y sus compañeros se hicieron un festín con la iniciación.
El video de la «humillación» que tuvo que vivir Granit Xhaka fue subido a las redes sociales por el arquero argentino Emiliano Martínez, donde se ve al resto de los jugadores del Arsenal disfrutando en silencio el pobre espectáculo e intentando darle el ritmo que le faltaba al suizo con golpes en las mesas.
Es de esperar para los hinchas de los Gunners que Xhaka tenga más habilidad para jugar que para cantar, porque el joven de 22 años está lejos de ser un buen animador de karaoke.
