0 of 5
PUBLICIDAD
El mejor jugador de la historia del básquetbol, Michael Jordan, asumió su papel de líder de opinión y con una emotiva carta anunció la donación de US$2 millones para el combate del racismo en Estados Unidos.
En la misiva el ex jugador de los Chicago Bulls y la selección estadounidense expresó su molestia por el trato que sufren los ciudadanos de raza negra en el país de Norte América, y para eso recordó un duro momento familiar cuando su padre falleció.
La carta publicada en The Undefeated llega como una reivindicación por los asesinatos perpetrados por la policía a Alton Sterling, fallecido en Luisiana tras un incidente tras recibir varias disparos en el pecho mientras lo tenían inmovilizado y Philando Castile asesinado de forma artera por la Policía de Minnesota.
Los 2 millones de dólares serán donados a la Asociación Internacional de Oficiales de Policía y su nuevo Instituto para la Comunidad y las Relaciones Policiales, con un aporte para el Fondo de Defensa Legal de la NAACP, emblemática institución que combate los abusos raciales.
Revisa el emotivo escrito de Michael Jordan
«Como americano orgulloso, padre que perdió a su propio padre en un acto de violencia sin sentido y hombre negro, me siento profundamente afectado por las muertes de afroamericanos a manos de la policía y enfadado por los asesinatos cobardes y llenos de odio de los oficiales de servicio.
PUBLICIDAD
Comparto el luto con las familias que han perdido a sus seres queridos, ya que conozco demasiado bien ese sentimiento. Fui criado por padres que me enseñaron a amar y respetar a las personas sin tener en cuenta su raza o su procedencia, así que estoy apenado y frustrado por la retórica divisiva y la tensión racial que parece haber empeorado últimamente.
Sé que este país es mejor que eso y ya no puedo permanecer callado. Necesitamos encontrar soluciones que aseguren que la gente de color reciba un trato justo e igualitario y que los policías, que ponen sus vidas en juego cada día para protegernos a todos, sean respetados y apoyados.
Durante las últimas tres décadas, he podido ver de cerca la dedicación con la que trabajan los policías que nos han protegido a mí y a mi familia. Tengo el máximo respeto por su sacrificio y su servicio. También reconozco que las experiencias de mucha gente de color con la policía son muy diferentes a la mía. He decidido alzar la voz con la esperanza de que podamos volver a unirnos todos como americanos, mediante la educación y el diálogo pacifico, para lograr un cambio constructivo.
Para apoyar ese esfuerzo, voy a hacer una contribución de un millón de dólares a cada una de las siguientes dos organizaciones, la Asociación Internacional de Oficiales de Policía y su nuevo Instituto para la Comunidad y las Relaciones Policiales y al Fondo de Defensa Legal de la NAACP (organización que proporciona asistencia legal a pobres afroamericanos y que lucha por sus derechos civiles). El trabajo de la primera se centra en construir un sentimiento confianza y en promocionar las mejores prácticas en la comunidad policial.
Mi contribución al Fondo de Defensa Legal de la NAACP, la organización más antigua que lucha a través de la vía legal por los derechos civiles, apoyará su actual trabajo para llevar a cabo reformas que ayuden a construir esa confianza necesaria y ese respeto entre las comunidades y los cuerpos de seguridad. Aunque sé que estas contribuciones no serán suficiente, espero que los recursos ayuden mucho a ambas organizaciones.
Somos unos privilegiados por vivir en el mejor país del mundo, un país que nos ha proporcionado a mi familia y a mí las mejores oportunidades. Los problemas a los que nos enfrentamos no aparecieron de un día para otro y no se resolverán mañana, pero si trabajamos todos juntos, podemos fomentar un mejor entendimiento, cambios positivos y la creación de un mejor mundo para nosotros mismos, nuestros hijos, nuestras familias y nuestras comunidades»