Un 0-4 fue el resultado de una destacada actuación de Atlético Nacional que le propinó una humillación a Peñarol en su propio estadio y con la mirada de más de 30 mil hinchas impotentes ante la superioridad de un equipo colombiano que pasa por un momento envidiable por muchos.
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En la cancha estaban dos equipos que en algún momento han ganado la Copa Libertadores. Peñarol en cinco oportunidades ha levantado el trofeo continental, pero en la cancha parecía un equipo sin historia y debilitado por un cuadro verdolaga que aprovechó las individualidades y además con el paso del tiempo está empezando a actuar como un equipo demoledor.
Y es que los pases, la forma de jugar y el entendimiento de Nacional fueron evidentes en un partido que tendrá que ser calificado con una puntuación alta para el cuadro antioqueño que hizo todo para ganar los tres puntos en el mítico estadio Centenario.
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La primera victoria en Copa Libertadores frente a Universidad de Chile, la ratificó ante Peñarol.
Jherson Córdoba en una noche inspirada fue el encargado de abrir el marcador a los ocho minutos de la primera etapa tras una buena habilitación de Macnelly Tórres. Córdoba con un fuerte remate venció la resistencia de Carini.
Nacional fue un equipo que en ningún momento se echó para atrás y aprovechaba el contragolpe ante una defensa uruguaya que no reaccionaba y se veía lenta.
Antes de la segunda anotación, los visitantes dieron dos sustos a través de dos remates que terminaron en el palo.
Pero apenas empezó el segundo tiempo llegó el gol para Nacional. Pabón peinó un balón en el área que le quedó de nuevo a Córdoba y su remate no falló.
Peñarol no quería una derrota más abultada y se fue al frente del ataque pero con pocas ideas y más intenciones que quedaron en nada. Y ese fue el error que cometió porque a través del contragolpe llegaron los otros dos goles del cuadro antioqueño.
El autor fue Dorlan Pabón que supo sacar ventaja de su buena definición y de paso cerró un partido que deja buenas sensaciones en la hinchada verde y que además deja al equipo como líder del grupo.
Después del juego el volante Jherson Córdoba que fue la figura se refirió a este victoria. “La verdad que estamos muy contentos porque más que un equipo somos una familia que vinimos acá con mucha motivación y mucha ilusión. Eso es lo que estamos demostrando en el campo, alegría y sacrificio”, dijo Córdoba.
El volante no creía que fueran a ganar por ese marcador “Hay que ser sinceros y no pensabamos ganar por tanto, pero igual lo buscamos y lo conseguimos”.
El próximo juego de Nacional será el próximo 8 de marzo en Argentina ante Godoy Cruz.