La captura de Sebastián Murillo fue una operación conjunta con la DEA y según reveló el Espectador, en este operativo participaron agentes encubiertos que se ganaron la confianza de Murillo quien manifestó que se escondería un tiempo mientras las cosas se enfriaban. Además, los investigadores afirman que Lindolfo y Vaneza pactaron simular su separación , luego de que se enteraran que la DEA estaba tras la pista sus negocios ilícitos.
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A pesar de que el vocero de la presentadora desmiente que la separación fue una fachada, el día de la captura Vaneza se encontraba en el apartamento junto a Murillo, en un lujoso sector de Medellín.
Por el momento las autoridades están investigando si los bienes adquiridos por la presentadora fueron producto de su trabajo o si por el contrario, la presentadora utilizó los recursos de Murillo, que provienen de la droga y otras actividades ilícitas, para adquirir sus negocios.
Sebastián Murillo, según la DEA, desde hace 4 años se convirtió un hombre muy importante dentro de la organización de ‘La Oficina’ de envigado.