Sebastián Murillo, exesposo de la presentadora de Sábados Felices, Vaneza Peláez, es hijo de Rodrigo Murillo Pardo, que era dueño de las joyerías Felipe, quien murió asesinado el 26 de enero de 1986. Por su muerte fue investigado Roberto Escobar Gaviria, el hermano mayor de Pablo Escobar.
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De acuerdo con El Espectador, tras la muerte de Murillo Pardo, que además era patrocinador de ciclismo, en ese entonces se estimó que la fortuna que poseía era “incalculable”. Pero las investigaciones de la DEA y la Dijín les permitirían afirmar en la actualidad que tendría nexos con el cartel de Medellín.
Murillo se habría presentado ante la sociedad como un joven ganadero, amante de los caballos y heredero de la riqueza de su padre. Sin embargo, las autoridades de Estados Unidos consideran que su patrimonio ha crecido de la mano de la ‘Oficina’, por lo que ahora buscarán iniciar un proceso de extradición.
La Dijín cree que Murillo se convirtió en el heredero de la ‘Oficina, tras la entrega de Fredy Alonso Mira Pérez, alias ‘Fredy Colas’, en el 2001. Desde entonces el poder de Murillo dentro de la organización criminal habría crecido, según le dijo un investigador al mismo medio.
Murillo era buscado por homicidio, concierto para delinquir agravado y ocultamiento de pruebas, por el caso del asesinato de José Antonio Ocampo Obando, alias Pelusa, quien fue asesinado el 22 de abril de 2017 en la vía Las Palmas.
Así operaba Murillo
Murillo se había especializado en cobrar deudas superiores a los 1000 millones de pesos, lo que las autoridades consideran, eran producto de actividades ilícitas a favor de terceros y a cambio de un gran porcentaje del dinero. Según la declaración de la Policía al mismo medio, “Lo lograban mediante amenazas y actos violentos como homicidios”.
Por otro lado obligaba a sus víctimas a firmar documentos de traspaso de propiedades para cubrir el pago de deudas. Otro capturado fue Martín Fernando Tamayo, jefe de la Odin Caicedo, considerado socio de Murillo y quien se dedicaban a delinquir en las comunas ocho, nueva y diez de Medellín.