«En 30 años tenemos la primera oportunidad de pensar en dejar de ser el primer abastecedor de cocaína en el mundo», dijo Villegas en un debate de control político citado por la Comisión Segunda del Senado de la República.
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Según el ministro, cifras de Naciones Unidas indican que los años pico en materia de cultivos ilícitos fueron «2015 y 2016» y que las hectáreas «deben estar rondando las 100.000 o 110.000».
«Ese contexto de cifras es el que da la proporcionalidad de la intervención que estamos haciendo. Cuando sobre 110.000 hectáreas se propone un plan de erradicación forzosa de 50.000 para este año y de sustitución en 12 meses, a partir de mayo, de unas hectáreas parecidas a 50.000, se denota una intervención realmente importante», comentó.
Además, agregó, «tenemos 9.000 hombres dedicados a la lucha contra los cultivos ilícitos».
Durante la visita de la semana pasada a la Casa Blanca del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, su homólogo estadounidense, Donald Trump, le expresó preocupación por el aumento en los cultivos de coca en Colombia.
Cálculos del Gobierno de EE.UU. señalan que en 2016 crecieron un 18 % hasta alcanzar la cifra récord de 188.000 hectáreas sembradas, con una producción potencial de cocaína de 710 toneladas métricas.
«Recientemente, hemos visto una tendencia muy alarmante. El año pasado el cultivo de coca y la producción de cocaína en Colombia alcanzaron un nivel récord, algo que espero que el presidente (Santos) remedie muy rápido», afirmó Trump.
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«Quizá ningún área sea más importante en lo que a nuestra cooperación se refiere que nuestro esfuerzo conjunto para acabar con los terribles crímenes de drogas que plagan a nuestros dos países», subrayó el mandatario estadounidense.
