Tras una primera jornada intensa, las FARC continuaron hoy su Décima Conferencia Guerrillera en la que avanzan en lentos debates pero con aparente unanimidad hacia la ratificación del acuerdo de fin del conflicto alcanzado con el Gobierno colombiano.
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Antes del inicio del segundo día de debates, el jefe del equipo negociador en los diálogos con el Gobierno, Luciano Marín Arango, alias «Iván Márquez», dio una breve declaración a la prensa que arrojó cierta luz sobre lo que acontece en la asamblea.
Hasta el momento, los 200 delegados guerrilleros debaten a espaldas del centenar de medios que han llegado a los Llanos del Yarí, un corredor natural en la periferia de la Amazonía colombiana, para cubrir por primera vez la conferencia, ya que las nueve anteriores se hicieron en la clandestinidad.
En una zona de campamentos custodiada por guardias armados, los delegados se reúnen a diario con los miembros del Secretariado (mando colegiado de las FARC), que se sientan al frente formando una U que les permite la interlocución directa con los representantes de los diferentes frentes guerrilleros.
Al frente de la reunión está el número uno de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, alias «Timochenko» junto a «Márquez», quienes prestan atención y toman nota de las diferentes intervenciones.
Bajo la estructura de bambú construida para que los asistentes puedan resistir el duro clima de la región, preside el espacio una bandera de las FARC con la silueta de su fundador, Pedro Antonio Marín, alias «Manuel Marulanda» o «Tirofijo».
Alrededor, diferentes carteles alertan en castellano e inglés que es un área restringida a la que solo pueden acudir quienes toman parte en la conferencia.
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Cuba, el país donde se llevaron a cabo las negociaciones, está muy presente en la sala de reuniones, donde numerosos guerrilleros portan camisetas o gorras con su bandera. Además, el omnipresente «Che» Guevara aparece incluso en la zamarra de «Timochenko».
Y mientras, se van sucediendo las intervenciones de los delegados de diferentes unidades que comienzan con un solemne: «camaradas, buenos días».
En su resumen al inicio del día, «Márquez» explicó que ya han intervenido los delegados del Bloque Magdalena Medio y Comandante Alfonso Cano, alias del anterior número uno de las FARC, que murió en un ataque militar el 4 de noviembre de 2011.
Antes, intervino «Timochenko», quien hizo un repaso histórico de las FARC y los diferentes intentos de alcanzar la paz en un documento que «Márquez», número dos de la guerrilla, calificó como «denso».
Sin embargo y pese a que es el principal temor, hasta el momento no se han mostrado disidencias internas.
«Márquez» ha dicho que hay un «total apoyo» entre los diferentes delegados al acuerdo rubricado el pasado 24 de agosto con el Gobierno.
Ya el sábado, en un discurso previo a la inauguración de la conferencia, «Timochenko» había anunciado que la decisión que tomen tendrá «carácter vinculante» y por tanto será de obligado cumplimiento para todos los miembros de las FARC.
De este modo, se evitan disidencias y quienes no se acojan al acuerdo no podrán mantenerse en el monte como miembros de esa guerrilla.
Hasta el momento, solo el Frente Primero se había mostrado reacio a cumplir el acuerdo y desmovilizarse, pero según pudo conocer Efe, han enviado a un delegado a la conferencia para participar en el debate.
Con la opacidad mostrada en el primer día, donde otro miembro del Secretariado, Jaime Parra, alias «Mauricio Jaramillo» o «El médico», dio una rueda de prensa en la que no solventó las dudas surgidas, no se ha podido despejar la incógnita del apoyo que dará ese frente a los acuerdos o si nacerá una disidencia.
La mayor ruptura en la dinámica de los debates fue la llegada de de 24 presos de las FARC que fueron liberados ayer por el Gobierno para que pudieran asistir como delegados, en lo que «Márquez» calificó como un gesto «de buena voluntad» del presidente colombiano, Juan Manuel Santos.
El negociador guerrillero también explicó que el primer día debatieron largo y tendido acerca del primero de los puntos del acuerdo, referido a la reforma rural integral, y adelantó que de la conferencia saldrá una formación política sobre cuyo nombre ya han recibido propuestas.
El acuerdo de paz, una vez aprobado por la conferencia, será firmado en un acto solemne en Cartagena de Indias por Santos y «Timochenko» el 26 de este mes.
Posteriormente será sometido a consulta popular en un plebiscito que se celebrará el 2 de octubre.
