La medalla de oro de Caterine Ibargüen en salto triple en los Juegos Olímpicos de Río desató la euforia en Colombia que se paralizó para ver en acción a su estrella de ébano.
A la hora de celebrar lo hicieron desde el más humilde de los colombianos hasta el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, quien acostumbra a seguir el desempeño de los atletas del país en los diferentes eventos deportivos.
«Gracias por esta alegría. Felicitaciones campeona», escribió el jefe de Estado en Twitter en un mensaje en el que añadió que fue un «inmenso salto de oro».
Recomendados
Mario Hernández y su queja viral por pasaje de 10 millones de pesos
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/metroworldnews/Y6JCAKGZ3BH6XGCXJ6K2UGDBBA.png)
Revelan nombres de menores fallecidos en bombardeo al ELN en Chocó
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/metroworldnews/DW2G6VBFNNHMRN4CL4OUJTYBHA.jpg)
“Estoy orgullosa de mirar a la cara a los colombianos”, dice Karen Abudinen
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/metroworldnews/TZIEOTYO25HFLNCUOXBZT5LLIE.jpg)
Además de concentrar la atención de los medios de comunicación tradicionales, la atleta nacida hace 32 años en la población antioqueña de Apartadó, arrasó en las redes sociales con etiquetas como «#CatherineIbarguen», «GraciasCaterine», «VamosCatherine» o «Grandecaterine», entre otras.
Con su oro, Ibargüen se convierte en la primera atleta colombiana en ganar un oro olímpico y es el segundo del país en Río de Janeiro luego del logrado por el levantador de pesas Óscar Figueroa.
«Hoy pude hacer un sueño realidad», dijo la campeona a Caracol Televisión luego de enlazar el metal más preciado con un salto de 15,17 metros en su cuarto intento.
Ibargüen fue escoltada por la venezolana Yulimar Rojas, quien saltó 14,98 y se colgó la plata, en tanto que la kazaja Olga Ripakova con su salto de 14,74 metros, fue bronce y cerró el podio de Río.
Al igual que lo sucedido horas antes en la pelea de Yuberjen Martínez frente al uzbeco Hasanboy Dusmatov, en la que el colombiano ganó medalla de plata, las radios y las televisiones locales siguieron al milímetro los movimientos de Ibargüen que no desentonó porque era la máxima favorita para subir a lo más alto del podio.
La celebración de la colombiana fue en medio de sonrisas, envuelta en la bandera de Colombia y con un sombrero «vueltiao», típico de la costa atlántica y símbolo cultural del país.
Ibargüen, plata en Londres 2012, puso en la vitrina el único título que le faltaba: el oro olímpico pues ya había sido múltiple campeona suramericana, centroamericana, panamericana y mundial.
