Los diálogos de hoy entre el Gobierno colombiano y la Cumbre Agraria, Étnica, Campesina y Popular, que mantiene un paro agrario desde el lunes, derivaron en un acuerdo para levantar el bloqueo que se registra en varias vías del país, donde las protestas continúan haciéndose oír.
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El primer cara a cara entre representantes de la Cumbre y el Gobierno, que ya se ha reunido estos días con comunidades campesinas, tuvo lugar en Cali con la asistencia de miembros de la ONU y la Defensoría del Pueblo.
Por parte del Ejecutivo asistieron los ministros de Interior, Juan Fernando Cristo; Agricultura, Aurelio Iragorri, y el alto Consejero para el Posconflicto, Rafael Pardo, que abordaron la situación con la Cumbre, movilizada en contra de lo que consideran la «profundización de las políticas neoliberales» del Gobierno.
Según destacó el Ministerio de Interior en un comunicado, en la reunión se alcanzaron acuerdos para levantar los bloqueos en los departamentos de Huila, Valle del Cauca, Nariño, La Guajira y Casanare, mientras que se previnieron idénticas medidas en Arauca, Antioquia, Caldas y Cesar.
También se determinó que la Fuerza Aérea transportará medicinas y suministros médicos a la ciudad de Popayán, capital del Cauca, en el suroeste, «para evitar que el bloqueo de la vía Panamericana afecte la atención de los pacientes con insuficiencia renal crónica terminal».
Por su parte, la Cumbre indicó en un comunicado que exigen garantías para iniciar un diálogo formal con el Gobierno, tales como la «desmilitarización y cese de acciones represivas en todos los puntos de concentración y la libertad inmediata y no judicialización de todas las personas detenidas» en el marco de las protestas.
Asimismo, pidieron atención humanitaria a todos los puntos de movilización y que se investiguen de forma inmediata los «asesinatos, amenazas de grupos paramilitares a las organizaciones y comunidades, y declaraciones estigmatizantes, intimidadoras y racistas» contra quienes participan en las movilizaciones.
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Mientras la reunión avanzaba en Cali, en el resto del país continuaban las manifestaciones, especialmente numerosas en el puerto de Buenaventura, el más importante de Colombia sobre el Pacífico.
Allí, más de 150 embarcaciones bloquearon la entrada al puerto, lo que evitó la llegada de embarcaciones internacionales, una acción llevada a cabo por las comunidades afrodescendientes que participan en el paro.
En Cauca se reportó la quema de un vehículo policial en una carretera.
Así las cosas, hoy se conoció un video en el que varios miembros de la Asociación de Colombiana de Camioneros (ACC) anuncian que irán a paro a partir de las 00.00 hora local del próximo lunes, sin especificar si esa movilización se hará a nivel nacional.
«En vista del incumplimiento de los compromisos pactados en los últimos meses, lanzamos la hora cero de la inmovilización camionera, para el lunes 6 de junio del 2016, a las 12 de la noche. Hasta ahora no nos han cumplido nada de lo pactado en el paro inmediatamente anterior», sostiene en la grabación un individuo no identificado.
Las protestas, que son de carácter indefinido y esperan movilizar a unas 100.000 personas, dejan desde el lunes tres indígenas muertos, Willington Quibarecama, Gersain Cerón y Marco Aurelio Díaz Ulcué.
Quibarecama falleció el lunes al caer de un viaducto tras evitar una tanqueta policial en Buenaventura, en tanto que Cerón y Díaz murieron el jueves en una zona rural de Caldono (Cauca).
Según la autopsia, ambos murieron por proyectiles «que corresponden a material artesanal no convencional», dijo en un comunicado el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, lo que descartó que se tratara de munición de las autoridades.
«Las autoridades no tienen ese tipo de armas. Ese tipo de armas son artesanales, de construcción manual, son modificadas. (…) Ese tipo de armas se pueden modificar por muchas personas», explicó a Efe el director del Instituto, Carlos Valdés.
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