Derivados de la pesca, licores y piscinas en centros recreacionales hacen parte del foco de las jornadas de inspección, vigilancia y control que está realizando la Unidad Ejecutora de Saneamiento del Valle del Cauca, Uesvalle, durante el inicio de la Semana Santa.
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De acuerdo con la entidad, estos elementos son sujetos de mayor riesgo en esta temporada debido a la disminución del consumo de carnes rojas y a las salidas de vacaciones a centros recreacionales.
«Estamos llevando a cabo estas acciones en 34 municipios para evitar que se comercialicen alimentos de mala calidad o bebidas alcohólicas adulteradas. También estamos verificando las condiciones higiénicas en las piscinas de uso recreacional para proteger la salud pública de los vallecaucanos», dijo el ingeniero John Jairo Zapata, subdirector técnico de la Uesvalle.
Con el fin de evitar intoxicaciones por consumo de pescado, la entidad compartió las siguientes recomendaciones:
- Adquirir el pescado en lugares reconocidos.
- Revisar que las escamas estén brillantes y bien adheridas.
- Al tocar el pescado con el dedo, corroborar que la piel esté firme y húmeda.
- Verificar que el animal tenga las branquias húmedas y los ojos secos y brillantes.
- Descartar cualquier pescado que presente un olor desagradable.
- Si es pescado seco, verificar que su textura sea firme, que no presente colores rojizos o azulados y que no expida olor amoniacal, pues este es característico del inicio de la descomposición.
- En los enlatados de atún o sardinas se deben verificar la fecha de vencimiento y el registro sanitario Invima.
- Comprobar que las latas no estén embombadas, con sellos rotos o estado de oxidación.
En cuanto a las bebidas alcohólicas, el ingeniero Zapata aseguró que «Todos nuestros funcionarios están haciendo seguimiento para evitar intoxicaciones con alcoholes adulterados o alterados».
Por último, el funcionario añadió que se están haciendo visitas a los sitios de recreación para verificar el cumplimiento de las normas higiénico-sanitarias y demás condiciones de seguridad, pues las piscinas pueden ser un medio de propagación de enfermedades.
«Les recomendamos a los turistas y viajeros que se protejan de los mosquitos, pues transmiten enfermedades como dengue, zika y chikungunya. Deben usar repelente, ropa que cubra las extremidades y toldillos al dormir», puntualizó el ingeniero.
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