Arreglo del sendero deportivo, adecuación de gimnasios al aire libre, reconstrucción de canchas para deportes con pelota y remodelación del kiosco restaurante son algunas de las obras que se están llevando a cabo en el Ecoparque Río Pance con el liderazgo de Indervalle y que buscan que sus visitantes obtengan mayores beneficios de este lugar.
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Según Carlos Felipe López, gerente de Indervalle, el proyecto requirió una inversión cercana a los $2000 millones y se está ejecutando con recursos económicos otorgados al departamento por el Sistema General de Regalías, que financia proyectos territoriales con las ganancias obtenidas de la explotación de recursos naturales no renovables como el petróleo.
“Esperamos terminar las obras en junio. No solamente estamos buscando hacer infraestructura deportiva sino que los vallecaucanos hagan deporte. Esto va de la mano de la Secretaría de Salud departamental para que cada vez disminuyan los índices de obesidad, los problemas cardiovasculares, etc. Todo gira en torno a la actividad física”, dijo el funcionario.
Cabe recordar que al Ecoparque Río Pance lo visitan, en promedio, 2000 personas cada día e incrementa la afluencia los fines de semana. Ocupa cerca de 60 hectáreas y su pista de trote tiene un poco más de cuatro kilómetros de longitud. Allí se pueden apreciar 120 especies de aves y hay un ecohotel que presta el servicio de hospedaje, piscina, temazcal y restaurante.
Desde el 2015, la entidad encargada de administrar el balneario más grande de los caleños es la Corporación para la Recreación Popular, por designio de la Gobernación del Valle.
“Esto es mucho más que una obra de cemento. Sin lugar a dudas, los caleños tienen que apropiarse de este lugar porque un ícono de la ciudad es el río Pance, y qué mejor que el Ecoparque como un espacio deportivo que sea amado, que genere un sentido de pertenencia y que invite a la gente a disfrutar de ese bello paisaje”, añadió López.
Un nuevo atractivo
Desde el año pasado, los visitantes del Ecoparque Río Pance tienen un novedoso plan además de hacer deporte en los senderos y canchas, bañarse en el río o disfrutar alguno de los manjares típicos que se ofrecen en los kioscos y restaurantes: se trata de la Escuela Taller de Cali, un espacio destinado a la formación en jardinería de jóvenes vulnerables y que permanece abierto al público todos los días.
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Allí podrán encontrar, entre otros atractivos, un orquideario en construcción, una huerta medicinal indígena construida por el cabildo Nasa, un lago con peces, una zona de compostaje y otros proyectos que los mismos estudiantes han construido durante los meses que la escuela ha estado en funcionamiento.
Además, quienes lo deseen podrán contratar los servicios de los jóvenes jardineros certificados por el Sena y así apoyar el proceso social que se está llevando a cabo con ellos para alejarlos de su condición de vulnerabilidad. La Escuela Taller de Cali está a 200 metros de la Entrada 2 del Ecoparque.
Otros proyectos con regalías
Entre los planes que tiene el departamento con el dinero del Sistema General de Regalías también está la renovación del Museo Interactivo Abrakadabra y el Museo de Ciencias Naturales Federico Carlos Lehmann, ambos ubicados en ‘La manzana del saber’ y que fueron sometidos a un proceso de rediseño a cargo de profesionales del Parque Explora (Medellín).
Para este proyecto se invertirán cerca de $800 millones y el objetivo es fortalecer los contenidos y crear una experiencia unificada para quienes visiten los dos lugares, además de incrementar la interactividad y la exploración para promover el aprendizaje. La reinaguración de ambos espacios está planeada para mediados del 2019.
