Los habitantes del Dovio, municipio ubicado en el norte del Valle del Cauca, aseguran que la estatua de Cristo Resucitado empezó a botar sangre el pasado jueves después de la celebración de la eucaristía. Esto hizo que decenas de personas se acumularan en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen para corroborar el supuesto milagro.
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«Se manifestó una aparición de unas marcas rojas en una imagen del resucitado que se tiene en la iglesia. Estas marcas tienen forma como si fueran de sangre, de color rojo, y pues la fe de la comunidad, la información que da el sacerdote también, es que no fueron pintadas por ninguna persona, la iglesia estuvo abierta durante las 24 horas que hay adoración perpetua, y aparecieron esas señales en la imagen de Jesús Resucitado. (…) El día de la ascensión del señor de acuerdo a las creencias nuestras católicas, y que iba a ser el último día que iba a estar expuesto el resucitado, aparecieron estas señales que tienen toda la similitud de unas marcas de sangre», aseguró el alcalde de El Dovio, Rodolfo Vidal.
Según el padre Juan Diego Gómez, la imagen está lo suficientemente alta como para que alguien le hubiera aplicado el líquido rojo que empezó a brotarle por distintas partes. Además, el recinto estuvo abierto todo el día a disposición de los fieles quienes atestiguaron el hecho.
«Es un signo de fe, es una llamada que Dios nos hace a buscarlo. Recordemos que Jesús está vivo, real y presente a través de la eucaristía en la capilla del santísimo. (…) Nosotros como iglesia católica somos muy reconocedores de la fe, y este es un acontecimiento de fe que solamente puede ser creído desde la fe. Es una manifestación de Dios, pero igual es nuestra fe la que hace que cada día sea más viva y más real en medio de nosotros», dijo Gómez.