La comunidad de la localidad de Engativá se encuentra desconcertada por la tala de más de 30 árboles del humedal Jaboque.
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Los vecinos del sector aseguran que el Distrito comenzó a cortarlos para darle paso a la construcción de los “senderos ecológicos”, propuestos por la Alcaldía de Peñalosa tras la firma del Decreto 565 del 2017, “por medio del cual se modifica la Política de Humedales del Distrito Capital, contenida en el Decreto Distrital n.º 624 de 2007, en relación con la definición de recreación pasiva y usos en los humedales”.
Es decir, con lo dispuesto se da vía libre a la construcción de ciclorrutas, senderos peatonales, alamedas, plazoletas, luminarias y adoquinado en humedales de la capital.
El Jaboque, que en lengua de los Muiscas puede significar ‘tierra de abundancia’, es uno de los cuerpos de agua impactados por el polémico proyecto.
Precisamente, en octubre de este año la Empresa de Acueducto de Bogotá abrió seis procesos licitatorios para que la ciudad cuente con senderos a lo largo de los ríos y humedales de la capital. El circuito ambiental contará con tres corredores: el del río Tunjuelo – Chiguaza, el corredor del humedal Jaboque y el de el humedal Juan Amarillo. Para todos habrá un proceso de contratación de su interventoría.
Inquieta la suerte del cuerpo de agua
“Desde el Distrito se viene instaurando una política de ejecución de ‘corredores ambientales’. El humedal Jaboque es uno de los ecosistemas que se pretende intervenir con ese proyecto, que como tal busca la construcción de ciclorrutas (…) En los recorridos que hemos realizado en el último mes, evidenciamos las primeras intervenciones que se están haciendo: encontramos la tala de arboles, en lo que se conoce dentro del humedal como el ‘bosque de las lechuzas’ o el ‘bosque encantado’, ubicado al lado del colegio Torquigua. Fue una tala indiscriminada”, advirtió a PUBLIMETRO una de las integrantes del colectivo Caicas, constituido por habitantes de la localidad de Engativá que luchan por la defensa y recuperación del humedal Jaboque.
Según la misma denuncia, en los espacios de socialización de proyecto, funcionarios del Distrito les han manifestado que la tala no tiene relación con los Senderos. Sin embargo, sostienen que es así, porque en el humedal no se tiene contemplado otro proyecto.
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“Es muy extraño, porque de un momento a otro empieza una tala indiscriminada en esa zona (‘bosque encantado’) que es la más virgen del humedal”, recalca la vocera de Caicas, tras señalar que aunque funcionarios de la Alcaldía se comprometieron con la comunidad a socializar los diseños completos del proyecto, para tener claridad de lo que le espera al Jaboque, a la fecha no han dado respuesta. Siguen esperando.
Por otra parte, Miguel Ángel Julio, ambientalista y antropólogo, recalcó a PUBLIMETRO que los árboles talados se encontraban dentro de la Zona de Manejo y Preservación Ambiental (Zmpa) del Jaboque: “Nos encontramos frente a un arboricidio más de la Administración Peñalosa, toda vez que la tala debe ser la última medida a considerar en el manejo de estas situaciones. Como ya se ha demostrado, el rigor con el que efectúan los estudios técnicos para determinar la tala, dejan mucho que desear”, afirmó.
¿Qué dice el Acueducto?
Frente a esta denuncia, el Acueducto de Bogotá enfatiza que las talas no tienen relación con el proyecto de los Senderos, ni con ninguna otra obra.
Según la entidad, la decisión se tomó luego de que el colegio Torquigua solicitó la valoración de los arboles que colindan allí.
“Nosotros hemos intervenido a la fecha 31 individuos. Estas intervenciones obedecen a una autorización que entregó la Secretaría Distrital de Ambiente, donde se valoraron estos individuos, que tenían una cercanía al colegio Torquigua, por el cerramiento perimetral, los cuales estarían generando riesgo –entre otras cosas– por su inclinación sobre estos cerramientos. Con base a este concepto técnico, procedimos a hacer las intervenciones. Previamente realizamos una divulgación con la comunidad educativa y con algunos vecinos del sector”, expresó a PUBLIMETRO Carlos Bello Blanco, coordinador ambiental de la Dirección de Abastecimiento del Acueducto de Bogotá.
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