Las autoridades desarticularon una banda dedicada a suministrar estupefacientes en las cárceles de Bogotá.
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La estructura, conocida como ‘Gorgona’, estaba conformada por nueve personas, quienes además de delinquir en las prisiones también distribuían droga en el municipio de Soacha (Cundinamarca) y en las localidades de Engativá y Kennedy, afectando los entornos de parques y colegios.
Las autoridades capturaron a cuatro miembros en fragancia y a los otros cinco por orden judicial.
«Las nueve personas fueron cobijadas con medida de aseguramiento por los delitos de fabricación, tráfico o porte de estupefacientes en concurso con concierto para delinquir», expresó la Policía.
Las investigaciones
Cinco mujeres, que hacían parte de la organización, ingresaban droga dentro de sus partes intimas, haciéndose pasar como familiares de los reclusos.
