«El hurto a bicicletas no debe ser considerado un delito simple, puesto que en el mercado se encuentran bicicletas que van desde 200 mil hasta 30 millones de pesos. En Bogotá existen puntos en los que los ciudadanos y las autoridades saben que ahí llegan las bicicletas y partes de bicicletas robadas, y lo que resulta más grave es que se comercia con ellas sin ningún tipo de restricción legal», expresó el concejal de Cambio Radical Jose David Castellanos.
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De acuerdo con la denuncia del cabildante, los puntos en los que se comercia con este tipo de elementos robados son: Abastos en el sur occidente, en el centro; de la calle 13 a la 12 con carrera 17, en el barrio 7 de agosto y en la localidad de Fontibón.
Para Castellanos, el atraco a ciclistas en la ciudad es un fenómeno de cuidado: «de acuerdo a cifras de la Secretaría de Movilidad, este delito afecta a cuatro localidades principalmente: Kennedy, Suba, Usaquén, y Engativá, revisando que desde 2014, a lo corrido de 2017, la cifra viene creciendo. Esto nos causa mucha preocupación».
