Se trata de una joven de 19 años quien asegura que desde muy pequeña su padre biológicola violentaba sexualmente, cansada de la situación y con miedo por las amenazas decidió grabar con su celular los abusos sexuales cometidos por su progenitor.
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La joven decidió colocar su dispositivo móvil cerca del sitio donde era abusada y en varias oportunidades logró grabar las situaciones, luego de esto pasó a un disco compacto los videos. Luego informó a las directivas del colegio en donde adelantaba sus estudios para que los profesores intercedieran en una denuncia penal.
El hombre le había dicho a su hija que si lo denunciaba «nadie le iba a creer y tanto su madre y como otros familiares, irían a morir». Sin embargo al tener las pruebas, la Fiscalía inició el proceso judicial, para acusarlo por los vejámenes a los que fue sometida la menor.
Según dio a conocer el El Espectador, el fiscal del casi pidió condenar al hombre por los delitos de acceso carnal violento agravado, incesto y acto sexual con menor de 14 años, al considerar que: “Vulneró el bien jurídico de la libertad sexual, la formación psicológica de una niña que desde los 5 años está en formación del conocimiento sexual».
Por esta razón, el Juzgado condenó a 19 años y 6 meses de prisión a José Ricardo Aroca Céspedes, hallado responsable de abusar sexualmente de su hija durante 10 años. Fue recluído en La Picota.
