Las autoridades descubrieron en la tarde de este viernes una «chiquiteca» en un bar de la localidad de Bosa, en la que rescataron más de 200 adolescentes en alto estado de alicoramiento y bajo el efecto de sustancias estupefacientes.
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La fiesta se desarrollaba en un bar del barrio Bosa – Tropezón, que a pesar de tener una capacidad para 50 personas tenía metidos a más de 200 adolescentes consumiendo alcohol adulterado.
Lo peor que encontraron las autoridades locales fue que los jóvenes también estaban consumiendo estupefacientes como bazuco o pegantes, los cuales eran suministrados como parte de la boleta.
El alcalde local de Bosa, Julián Martínez, mostró su preocupación debido a que los menores de la localidad están realizando este tipo de fiestas en al menos seis barrios de Bosa. Los menores fueron recibidos por Bienestar Familiar.
En los últimos dos meses han sido detectadas cuatro fiestas clandestinas de gran tamaño en Bogotá, en donde han sido incautadas armas blancas, licores y alucinógenos.
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