Se lo han entregado a Evo Morales en Bolivia, a Rafael Correa en Ecuador y a Juan Manuel Santos en Colombia.
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Este 1 de diciembre, el flamante presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, AMLO, se convirtió en el primer mandatario de su país en recibirlo.
Se trata del tradicional Bastón de Mando que, desde hace algunos años, los pueblos indígenas de varios países de América Latina entregan a los nuevos presidentes que se comprometen con estas etnias largamente olvidadas por otros gobiernos.
Tiene su origen en las primeras civilizaciones y actualmente son utilizados por las autoridades locales tradicionales para reconocer a gobernantes, civiles o militares, denotando la autoridad de su portador.
En la investidura de AMLO participaron 68 pueblos originarios de México con una ceremonia especial en la cual le entregaron el báculo que simboliza el poder y la jerarquía que los líderes indígenas le reconocen.
El Bastón de Mando es un símbolo de respeto a la aceptación del cargo y representa el buen gobierno de los pueblos y para los pueblos.
Es un respaldo moral de parte de estas comunidades que marca el inicio del nuevo gobierno.
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Durante su campaña, López Obrador ya había recibido diversos bastones de varias comunidades que visitó en busca de apoyo en las urnas.
De su fallida campaña en 2006, ya tenía un Bastón de Mando que le entregaron lo indígenas de Metlatónoc, Guerrero.
Simbolismo y compromiso
Este sábado, representantes del recién creado Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, INPI, le entregaron la distinción.
