No hubo minuto de silencio, pero lo que ocurrió en el campo fue aún más emotivo.
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Antes de comenzar el partido amistoso entre Chile y Honduras en el estadio Germán Becker de Temuco, los jugadores de ambas selecciones se abrazaron durante unos segundos en recuerdo de Camilo Catrillanca, el joven indígena de 24 años que murió la semana pasada en un operativo policial y que desató una ola de protestas en Chile.
Fue un gesto que desafío la postura oficial de la Asociación Nacional de Fútbol de Chile, la ANFP, que a través de su presidente Arturo Salah había rechazado una petición para recordar al joven mapuche ya que "está fuera del ámbito de la actividad y del fútbol".
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La semana pasada diputados oficialistas tampoco quisieron participar en un minuto de silencio en honor a Catrillanca y abandonaron la sala parlamentaria.
Pero lo que no quería la ANFP que pasara fue justo lo que ocurrió y el partido trascendió más allá de la cancha.
"Fue una reflexión, un llamado a la paz y a la tranquilidad", comentó después del partido el capitán de Chile, Gary Medel.
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"Esperamos que todo se solucione de la mejor manera posible", añadió luego de la victoria de la Roja 4-1 sobre el combinado centroamericano.
Origen mapuche
Ese fue tan solo uno de los numerosos gestos en un duelo que estuvo marcado por simbolismos alrededor de la figura de Catrillanca.