No solo parece un niño, sino que se comporta como tal. "¡Quiero a mi mamá! ¡Quiero irme a casa!", grita con desespero desde la camilla del hospital. Tiene pulso. Llora, sangra y puede sufrir un paro cardíaco en cualquier momento.
PUBLICIDAD
Pero no tiene vida. Pediatric Hal es un robot. Uno que está llevando el realismo en medicina a otro nivel.
Fue creado para que estudiantes de pediatría y médicos profesionales practiquen con él todo tipo de operaciones.
La compañía detrás de su creación, Gaumard Scientific -una firma con base en Miami, EE.UU., que comenzó a usar tecnologías en medicina durante la Segunda Guerra Mundial- asegura que es el "simulador de pacientes pediátricos más avanzado del mundo".
Pero su aspecto puede resultar algo inquietante.
Los ingenieros de Gaumard Scientifica, sin embargo, dicen que es "decepcionante" que haya gente que lo encuentre aterrador, y a que ninguno de los médicos que trabajan con él les pareció que así sea.
Este es su aspecto: