¿Cuánto compartes en internet sobre la vida de tus hijos? ¿Y hasta qué punto quieres ver información sobre la vida de los hijos de los demás en las redes sociales?
El "sharenting" -un anglicismo que proviene de share (compartir) y parenting (paternidad)- consiste en documentar las primeras sonrisas, palabras, pasos… y cada una de las anécdotas de los más pequeños en Facebook, Instagram y otras redes sociales.
Y se ha convertido en una práctica tan habitual que el diccionario británico Collins lo incluyó en sus páginas en 2016. Desde entonces, el fenómeno no ha dejado de crecer.
Recomendados
Los podcasts de crónica negra que usa la policía para resolver crímenes
Tratan por anemia a la pitón hallada en una piscina con 500 garrapatas
La millonaria disputa entre la Iglesia católica y la ciudad de Roma por las monedas de la Fontana...
Hasta ahora, no ha existido otra generación de niños con una infancia tan pública. Y es probable que, cuando crezcan, muchos no estén de acuerdo con ello.
¿Hasta qué punto es dañino el "sharenting"?
3 categorías
Podría decirse que existen tres categorías de padres en las redes sociales:
- Los orgullosos
- Los protectores
- Los irritados
Los primeros son aquellos a quienes les encantaría que sus contactos de Facebook lo supieran todo sobre sus hijos. Y se encargan de hacerlo publicando cada foto y anécdota a través de la red social.