Los colombianos no acababan de salir de su estupor por el ataque con explosivos de ayer contra el cuartel policial del barrio San José, en Barranquilla, cuando hoy fueron despertados con la noticia de otro ataque, también con bomba, al Comando de Acción Inmediata (CAI) del barrio Soledad 2000.
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El CAI, que está ubicado en el municipio de Soledad, que hace parte del área metropolitana de Barranquilla, fue atacado pasadas las 04.00 hora local acción que dejó cuatro policías y un indigente heridos, todos fuera de peligro, según la institución.
Poco después se supo que cerca de la medianoche del sábado otros dos policías perdieron la vida y dos quedaron heridos cuando desconocidos detonaron un explosivo contra el puesto de Policía del corregimiento de Buenavista, en el municipio de Santa Rosa, departamento caribeño de Bolívar.
Los fallecidos fueron los policías Manuel Galvis Contreras y Ferney Alexander Posada, mientras que resultaron heridos los patrulleros José Rivas Contreras y José Faustino Riaño Álvarez.
La detonación ocurrió luego de un hostigamiento contra el puesto policial cuya autoría también investigan las autoridades.
Las autoridades tratan de determinar si el ataque en Soledad tiene relación con el de Barranquilla, por el cual fue detenido un hombre de 31 años identificado como Cristian Camilo Bellón Galindo, oriundo de Bogotá, que fue presentado ante un juez.
«Los casos de Barranquilla y Soledad pueden tener alguna relación, es lo que creemos de manera primaria con lo que tenemos en el marco de la investigación», dijo a periodistas el director de la Policía, general Jorge Nieto.
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Entre las hipótesis que barajan las autoridades está que los atentados hayan sido cometidos por bandas del crimen organizado, en respuesta a los golpes que le han asestado últimamente las autoridades, pero no se descarta que sean obra de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Esta guerrilla, que el año pasado inició en Quito diálogos de paz con el Gobierno, actualmente suspendidos, opera en la zona de Santa Rosa, en el sur de Bolívar, donde se produjo el ataque de anoche.
Los candidatos a la Presidencia para las elecciones de mayo próximo volvieron a condenar la escalada de violencia y pidieron al Gobierno respuestas efectivas.
Uno de los primeros en manifestarse fue el exvicepresidente Germán Vargas Lleras, quien pidió al jefe de Estado, Juan Manuel Santos, y al ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, castigo para los responsables.
«Dos nuevos ataques en Soledad, Atlántico, y el sur de Bolívar se suman al realizado ayer en Barranquilla contra la Policía. Hago un urgente llamado al presidente Santos y al ministro Villegas para que se haga frente de manera inmediata a esta situación», señaló en un mensaje de Twitter.
También habló el candidato presidencial del partido opositor Centro Democrático, Iván Duque, quien aseguró que estos ataques deben unir a todos los colombianos.
«Los ataques terroristas en Barranquilla, Soledad y el sur de Bolívar nos deben unir como país para condenar estos crímenes y no dejarnos intimidar de los violentos. El terrorismo debe ser enfrentado con determinación y con toda la capacidad sancionatoria de la Justicia», afirmó en redes sociales.
Para el aspirante presidencial de la Coalición Colombia, Sergio Fajardo, el país no puede «regresar a los tiempos del miedo, incertidumbre e impotencia».
«Merecemos y podemos vivir mejor, libres de las cadenas que nos quieren poner los violentos», afirmó.
Mientras las investigaciones siguen su curso, la Policía realizó en Barranquillalos funerales de los cinco miembros de la institución que perecieron en el atentado del sábado.
«Con profundo dolor despedimos los féretros de nuestros cinco policías que murieron en el ataque de ayer en Barranquilla. Que el Todopoderoso los acoja en su seno y conforte a sus seres queridos», manifestó el general Jorge Nieto en las honras fúnebres celebradas en la Escuela de Policía Antonio Nariño.
En la mañana de este domingo, los barranquilleros homenajearon a las víctimas con una caravana que recorrió varias avenidas de la ciudad.
La manifestación se detuvo unos minutos en la sede atacada en el barrio San José y terminó frente al Comando de la Policía Metropolitana de Barranquilla con consignas de apoyo a la institución y de rechazo a los violentos.
