TransMilenio emitió un comunicado para disculparse con los usuarios por el colapso vial que se presentó esta mañana, el cual afectó la operación en cuatro troncales de la capital colombiana. La empresa de transporte masivo explicó que la emergencia fue causada por una falla mecánica en un bus del concesionario SI 18 Suba. Sin embargo, también señaló que la congestión se vio agravada por las obras de la Primera Línea del Metro en la troncal Caracas y por la decisión de algunos usuarios de bajarse de los articulados.
Una falla mecánica que desató el caos
La situación de emergencia se originó en la Avenida Caracas con Calle 72, en el sentido norte-sur, donde un bus articulado sufrió una avería. La novedad fue reportada en horas de la madrugada, alrededor de las 6:04 a.m., generando de inmediato afectaciones en la operación del sistema. Según el reporte oficial de la mañana de hoy, el bus con las fallas mecánicas obligó a la flota troncal a realizar un contraflujo, lo que a su vez causó retrasos en las rutas y alta congestión. Inicialmente, la situación afectó de manera significativa a la troncal de la Calle 80, una de las vías de acceso y salida más importantes de la ciudad.
A medida que avanzaba la mañana, la congestión empeoró y el efecto dominó se sintió en gran parte del sistema. Reportes a las 7:04 a.m. confirmaban la afectación en las troncales de la Calle 80 y la Avenida NQS o carrera 30, sumándose a la ya afectada Caracas. Tan solo 19 minutos después, a las 7:23 a.m., la congestión ya impactaba también a la Avenida Suba y la Autopista Norte, colapsando un total de cuatro ejes viales principales.
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Las obras del Metro y los usuarios a pie, factores que agravaron el problema
La empresa de transporte reconoció en su comunicado que la presencia de las obras del Metro en la troncal Caracas hace que la operación sea “más retadora” de lo habitual. Esta situación impidió que la grúa llegara de forma ágil para retirar el vehículo averiado. Además, el comunicado destaca que la decisión de algunos usuarios de descender de los buses y caminar por la vía retrasó aún más la llegada de la asistencia necesaria. Este factor humano, en un contexto de congestión extrema, contribuyó a la prolongación del caos, afectando a miles de personas que se dirigían a sus trabajos y centros de estudio.
Normalización del servicio y el llamado a la paciencia
Cerca de las 8:07 a.m., una grúa finalmente llegó al lugar y empezó a trabajar en el remolque del bus. El trabajo de la grúa y la acción del personal de TransMilenio en el terreno permitieron que, minutos más tarde, a las 8:52 a.m., el vehículo fuera retirado y la operación comenzara a normalizarse de forma gradual. La empresa continuó con acciones para orientar a los usuarios que caminaban por la vía y para que pudieran acceder de nuevo a las estaciones y abordar los buses para continuar con su recorrido.
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El incidente de hoy pone en evidencia la fragilidad de la movilidad en Bogotá y la manera en que un evento aislado, como la falla de un solo bus, puede desencadenar un colapso masivo cuando se combina con factores externos como los proyectos de infraestructura y las decisiones de los propios usuarios. La búsqueda de soluciones a este tipo de problemas se convierte en una prioridad para el sistema de transporte de la capital.

