La muerte de Laura Camila Blanco, una joven periodista de 26 años que cayó desde el noveno piso de su apartamento en Bogotá, ha causado conmoción e incertidumbre entre sus familiares y amigos. El caso, inicialmente presentado como un posible suicidio por su pareja sentimental, ha sido rechazado con firmeza por los allegados de la comunicadora, quienes aseguran que existen serias inconsistencias en torno a los hechos ocurridos la madrugada del 27 de julio.
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El suceso tuvo lugar en el conjunto residencial Salitre Living, en el occidente de la ciudad. Según declaraciones del novio, la caída de Laura se produjo tras una discusión en la habitación. No obstante, para su familia, esta versión carece de sustento y está plagada de contradicciones.
Inconsistencias en la escena y versiones encontradas
Johan Blanco, hermano de la joven, expresó que al ingresar al apartamento encontraron varios elementos que levantaron sospechas sobre lo ocurrido:
- Un balde con vómito en la habitación
- La cama desordenada
- Daños visibles en el borde de la ventana
Además, en el lugar donde fue hallado el cuerpo, los celadores encontraron objetos personales de Laura Camila, como su bolso con papeles, llaves del carro y una chaqueta. “Los celadores recogieron en el lugar donde cayó objetos como las llaves del carro, la chaqueta y el bolso con los papeles”, relató Johan a Noticias Caracol, lo que, para la familia, indica que la joven tenía la intención de salir, no de quitarse la vida.
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Otro punto que alimenta las dudas es la supuesta compra de licor por parte de algunos asistentes a una reunión en el apartamento. Aunque los testigos afirmaron haber adquirido cervezas, en el lugar no se encontraron latas, botellas ni otros rastros de alcohol.
Una relación marcada por el control y la violencia
Según sus allegados, Laura Camila sostenía una relación conflictiva con su pareja, caracterizada por celos, control excesivo y episodios de agresión. Johan aseguró que intercedió en al menos una ocasión cuando la situación se tornó física. “Una vez llegaron a los golpes y yo me tuve que meter. Cuando mi hermana se dormía, él aprovechaba y le desbloqueaba el celular, la despertaba y le armaba un super problema. Era muy humillante, pordebajeaba demasiado a mi hermana”.
La madre de la periodista, Cecilia Osorio, también responsabilizó al joven de 27 años por un comportamiento que, según ella, fue apagando poco a poco la vida de Laura: “Él me la venía matando hace mucho tiempo. Fue apagándola y apagándola”.
Exigen que el caso se investigue como feminicidio
Tanto la familia como personas cercanas a Laura Camila han manifestado que no descansarán hasta que se esclarezcan los hechos y se descarte definitivamente la hipótesis de suicidio. Consideran que la investigación debe avanzar bajo el enfoque de feminicidio, debido a los antecedentes de violencia y la relación emocional marcada por el control.
El caso sigue bajo investigación, y la familia mantiene su llamado a la justicia para que la muerte de Laura Camila Blanco no quede impune.