El incidente de la noche del sábado 3 de mayo, en el que aficionados del Bucaramanga protagonizaron una bochornosa pela con otros hinchas y que intentaron presuntamente robar un bus en la localidad de Usme, sigue dejando de qué hablar.
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Luego de las capturas que se realizaron por parte de la Policía de Bogotá, la barra brava se refirió al hecho en cuestión por medio de un comunicado a la opinión pública.
“Desmentimos de forma categórica las acusaciones que señalan a nuestra barra como responsable del supuesto ”secuestro" de un bus. El vehículo en cuestión fue contratado previamente por nuestra organización para realizar un recorrido específico", se lee al inicio en el escrito.
Respecto a la pelea con otro hinchas, Fortaleza Leoparda Sur, nombre de la barra, aseguró que ellos no iniciaron la violencia.
“Cuando los buses transitaban por la localidad de Usme, fueron emboscados por integrantes de otras barras, quienes atacaron de manera premeditada y violenta con objetos contundentes”, explicaron los aficionados.
Incluso se refirieron al supuesto maletero en que presuntamente el conductor estaba metido.
“Desmentimos que el conductor del bus se encontrara escondido en el maletero. Esa información ha sido usada para generar un falso relato que criminaliza a nuestra barra”.
Sobre el procedimiento de la policía, los aficionados aseguraron que “fue parcializada y violenta”.
“Más de 30 personas fueron capturadas arbitrariamente, incluyendo mujeres embarazadas, personas heridas y ciudadanos sin relación con los hechos”.
Por su parte, también la Policía Metropolitana de Bogotá emitió un comunicado de prensa en el cual se refirió a lo sucedido.
“La Policía Nacional informa que frente a los hechos ocurridos en Usme, fueron capturadas 7 personas por los delitos de lesiones personales, daño en bienes del estado y violencia contra servidor publico”, indicó la Fuerza Pública en su comunicado de prensa.
De acuerdo con las autoridades, todo empezó por una riña múltiple que se había presentado entre hinchas de dos equipos. Al parecer, las cosas escalaron y la Policía tuvo que intervenir.