El robo de Duquesa, la perrita de raza pomerania, le dio la vuelta a toda la ciudad de Bogotá. Su dueña, la creadora de contenido Mariana Crow, difundió en sus redes sociales el video de cómo un vendedor ambulante ingresa al local en donde estaba el canino y lo hurta.
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El hecho sucedió a las 2 de la tarde del lunes 7 de abril en la carrera 13 con calle 78. La denuncia realizada por la mujer, hizo que la extorsionaran y amenazaran en su cuenta de Instagram.
“No han parado de extorsionarme, más de 30 llamadas de estas, por favor no difundir más la foto con la niña”, escribió la creadora de contenido.
Incluso en sus historias de redes, Mariana Crow dio a conocer el robo de otro perro que también había sido a manos de un vendedor de bolsas en la calle, tal como sucedió con Duquesa.
Incluso la misma denunciante confirmó que el hombre que se llevó a su perrita, es conocido en el sector.
Todo parece indicar que el robo haría parte de una banda delictiva que se encarga de hurtar caninos, con el objetivo de llevarlos a tiendas que venden perros en la avenida Caracas.
Fue así como la misma Mariana se dirigió a la zona a acompañar un operativo de la Alcaldía de Bogotá, donde se hace control a estos establecimientos.
Precisamente, en un comercio de estos, la creadora de contenido confirmó que Duquesa fue encontrada. Por los videos publicados en sus historias de Instagram, fue necesaria la presencia de la policía para lograr su rescate.
IDPYBA y Policía rescatan a Mía, canina víctima de maltrato en Teusaquillo
Gracias a un reporte ciudadano recibido a través de los canales oficiales de atención, el equipo del Escuadrón Anticrueldad del Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA), en acompañamiento de la Policía de Carabineros, realizó una visita de verificación de condiciones de bienestar en una vivienda de la localidad de Teusaquillo.
La intervención se llevó a cabo tras el reporte de presuntos hechos de maltrato físico en contra de Mía, una canina de apenas un año.
Durante la valoración de sus condiciones, el equipo técnico evidenció múltiples falencias en los parámetros de bienestar, con especial afectación en su salud física y comportamental, entre los cuales se identificó pelaje hirsuto, dolor a la palpación en la zona lumbar, alimentación inadecuada de tipo casero, ansiedad, y falta de recreación y esparcimiento, además de que la canina no contaba con un plan sanitario actualizado, lo que comprometía aún más su bienestar.