La Policía Nacional, en colaboración con la Fiscalía General de la Nación y el GAULA, ha logrado desarticular un intento de extorsión que involucraba a dos individuos que se hacían pasar por miembros del temido grupo criminal ‘Los Pachenca’. La operación, desarrollada el 19 de agosto de 2024 en la vereda Río Frío, municipio de Tabio en Cundinamarca, ha culminado con la captura en flagrancia de los sospechosos.
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Todo comenzó cuando un comerciante local comenzó a recibir amenazas a través de audios enviados por una persona que se identificaba con el alias de ‘El Burro’, afirmando ser parte del grupo delincuencial ‘Los Pachenca’. Este extorsionador exigía la exorbitante suma de mil doscientos millones de pesos, bajo la amenaza de dañar al comerciante y a sus familiares si no cumplía con la demanda. La situación se agravó al descubrirse que los delincuentes habían infiltrado la vida personal del comerciante a través de una empleada de su confianza, utilizando esta información para intensificar sus amenazas y exigir el dinero.
Gracias a una denuncia oportuna, las autoridades iniciaron una investigación que se desplegó con técnicas avanzadas de vigilancia y seguimiento. En menos de una semana, la policía pudo rastrear y localizar a los responsables, quienes fueron capturados mientras recibían una suma de 80 millones de pesos, parte del dinero extorsionado.
Este operativo es parte de un esfuerzo más amplio para combatir la extorsión, que en lo que va del año 2024 ha resultado en la captura de 130 personas involucradas en este delito. Las autoridades capitalinas hacen un llamado a la ciudadanía para que denuncien cualquier actividad sospechosa o amenazante a través de las líneas de emergencia 123 o 165, y así contribuir a la lucha continua contra la extorsión y el crimen organizado.
La exitosa desarticulación de este intento de extorsión no solo destaca la efectividad de las fuerzas de seguridad en la identificación y captura de criminales, sino que también subraya la importancia de la colaboración entre las autoridades y la comunidad en la erradicación de prácticas delictivas que afectan la seguridad de los ciudadanos.
