Esta semana las autoridades manifestaron su preocupación por el creciente consumo de agua en Bogotá después de que se flexibilizó la medida de racionamiento, lo cual no favorece el mejoramiento del nivel de los embalses del sistema Chingaza, encargados de atender la demanda del recurso hídrico en Bogotá y algunos municipios aledaños.
PUBLICIDAD
Aunque antes esta restricción estaba siendo aplicada todos los días en distintas zonas de la capital, a partir del pasado 1 de julio, la decisión del alcalde Carlos Fernando Galán fue que la medida aplicara día de por medio.
Desde entonces, solo hay cortes de agua relacionados con el racionamiento durante los días pares del mes. Aunque, según las cifras del Acueducto de Bogotá, durante las primeras semanas de julio se presentó un comportamiento estable en el consumo, esta tendencia empezó a cambiar durante los últimos días.
De acuerdo con Natasha Avendaño, la gerente del Acueducto, hubo varios días en los cuales el consumo superó el umbral de los 17 metros cúbicos por segundo, lo cual es demasiado alto para las condiciones actuales.
Pues bien, de acuerdo con el reporte más reciente de la Alcaldía de Bogotá que recoge datos del viernes 26 de julio, el consumo aumentó y el nivel de los embalses tuvo una importante recuperación.
El último reporte del nivel de embalses
“El consumo de agua en Bogotá durante el 26 de julio fue de 17.15 m³/s. El nivel de los embalses del Sistema Chingaza se encuentra en 48.13 %”, indicó la Alcaldía de Bogotá.
En la jornada anterior, habían reportado un consumo de 16 metros cúbicos por segundo y un nivel de los embalses que estaba fijado en 47,99 por ciento.
Vale decir que la meta de la Alcaldía de Bogotá es que el consumo diario baje a menos de 15 metros cúbicos por segundo. A su vez, se espera que para octubre la capacidad de los embalses del sistema Chingaza alcance el 70 por ciento.