El pasado fin de semana 20 y 21 de abril, las lluvias fueron una constante en gran parte del territorio nacional, esto son buenas noticias no solo para la ciudad de Bogotá que actualmente está bajo racionamiento de agua, sino para el país ya que también se encuentra en una crisis energética. Los aguaceros que hubo en los lugares donde se encuentran los embalses, hacen pensar a la ciudadanía si de esta manera se está cerca de finalizar la restricción del líquido vital.
PUBLICIDAD
De acuerdo a la compañía XM Administradores del mercado eléctrico en Colombia, los últimos dos días subieron el nivel de los embalses 0,87%, esto en gran medida a las acciones que están tomando los gobiernos locales pero sobre todo a las lluvias que han empezado a caer. Es así como el nivel de los embalses en general están en 29,5%.
Ya el presidente Gustavo Petro había dado adelantos de que durante este fin de semana, la situación había mejorado; sin embargo señaló “no cantar victoria”.
“Han empezado a subir los embalses que estaban llegando al mínimo, aun no hay que cantar victoria. Todo dependerá de la magnitud de las lluvias y del esfuerzo de ahorro que hagamos. De la situación de sequía hay que tomar aprendizajes”, dijo el mandatario quien agregó:
“1. Los embalses están ubicados en las mismas zonas climáticas. Cuando hay sequías todos se afectan al mismo tiempo. Embalses en la caída oriental de los Andes o en la caída occidental equiparan las cargas de una sequía porque estarían en zonas climáticamente diferentes. 2. Poder guardar el agua de los momentos intensos de lluvias y usarla en sequías, sigue siendo apenas una idea. 3. Desarrollar al máximo el potencial de energía limpia para no tener que acudir en momentos de embalses bajos a energías sucias. 4. Hay procesos intensos de urbanización como el de la sabana de Bogotá, que sobrepasa ya la cantidad de agua disponible”.
¿Cómo está el nivel de los embalses que abastecen de agua a Bogotá?
La capital colombiana no fue ajena a los fuertes aguaceros; sin embargo, las autoridades han sido claras en explicar que si llueve en Bogotá, no necesariamente llueve en el lugar donde están los embalses que le proveen agua a la ciudad, esto porque su ubicación es completamente distinta. El alcalde Galán explicó este lunes 22 de abril que la situación mejora y que las lluvias ayudan, pero para tener una real mejora, debe llover el doble.
“Vamos por buen camino. Los dos primeros días de este segundo ciclo, el consumo disminuyó frente al primer ciclo, pero debemos redujo nuestro consumo de agua todavía más. Ayer, 21 de abril, el consumo fue de 15,80 metros cúbicos por segundo. La meta es 15. Con corte al 21 de abril, el nivel de los embalses del Sistema Chingaza era de 15,51%. La meta de abril es llegar al 20%. La lluvia nos sigue ayudando, pero necesitamos muchas lluvias más y reducir más nuestro consumo”, aseveró el alcalde de los bogotanos.
Por otro lado, Chingaza, que es el que le provee el 70% de agua a la capital colombiana, actualmente reporta un nivel de 15,51%. De acuerdo a Galán, para levantar la medida de racionamiento de agua, la meta es llegar al 20%.