En la tarde del domingo 14 de mayo, fin de semana del Día de la Madre, se registró un feminicidio al interior del centro comercial Unicentro, al norte de Bogotá. Según las autoridades, un hombre identificado como Christian Camilo Rincón Díaz, buscó a su expareja, Erika Aponte Lugo de 26 años, quien se desempeñaba como subadministradora de un local comercial, quien luego de sostener una discusión, le disparó fulminantemente, mientras ella corría para protegerse.
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El feminicida, quien posteriormente se disparó con la misma arma, “un revolver ilegal calibre 38, estaba de descanso, vistiéndose con el uniforme del SITP, portando un carnet donde trabajaba antes”, informó la alcaldesa de Bogotá, Claudia López.
Rincón, fue llevado con vida a la Fundación Santa Fe, pero horas después falleció. Contra él no reposaba antecedentes penales, pero según el distrito, había estado involucrado en dos riñas contra otros sujetos en 2021 y 2022. Además, en su último intento de vinculación al Sistema de Transporte Urbano en marzo de este año, “incumplió (en varias ocasiones) asistir durante su periodo de prueba. Él planeó (el feminicidio) con clara sevicia e intencionalidad”, señaló López.
Los detalles de la solicitud de medida de protección que terminó en el feminicidio de Érika Aponte
Tras el feminicidio, la misma Personería de Bogotá informó en la mañana de este lunes, que Érika Aponte se había comunicado tres días antes a la Secretaría de integración Social por medio de la “llamada de vida” para poner en conocimiento la situación de violencia de género de la que era víctima.
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“Se otorgaron medida provisionales, se solicitó acompañamiento y protección al comando de policía de Soacha, lugar en el que la víctima reportó la residencia y se trasladaron las medidas para que la Comisaría de dicho municipio definiera el asunto de conformidad con la ley 2126 de 2021″, indicaron por medio de un comunicado.
Asimismo, la primera mandataria de Bogotá, indicó que ese mismo jueves 11 de mayo, Érika se acercó a una Casa de Justicia en Usme, donde antes vivía con su hijo, suegros y expareja, Christian Rincón. “Nos relató hechos de violencia contra ella y contra su hijo. El pánico de ella fue evidente”.
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En ese momento, dijo, le ofrecieron protección en alguna de las casas refugio, pero “nos dijo que no lo aceptaba porque ella ya se había trasladado a donde su padre y hermana en Soacha. Que allí se sentía más protegida y segura. Le insistimos en esta opción y que formulara ante la Comisaría una denuncia formal para aumentar la protección”.
Y así lo hizo Érika. Por medio de esa llamada, le fue otorgada cuatro medidas de protección que fueron informadas a la Policía de Soacha, la mayoría dirigidas a su agresor, como que no podía acercarse a su lugar de trabajo, zona donde perpetúo el feminicidio.
“Que Christian cesara las intimidaciones, la instrumentalización de su hijo. No podía acercarse a la nueva vivienda, ni en su lugar de trabajo (...) La Policía de Soacha tomó contacto con Erika el viernes 12 de mayo y coordinó con ella como empezarían a darse esas medidas de protección”, afirmó López.
Según datos del Distrito, entre enero y el 15 de mayo del 2023 se han registrado 12 feminicidios, tres más en comparación al mismo periodo del año anterior. Además, según el director de la Policía, William Salamanca, durante el fin de semana del Día de la madre, registraron tres feminicidios.
Líneas de atención por violencias basadas en género
155: Orientación nacional a mujeres
141: ICBF
018000112137 o Whatsapp 3007551846 : Línea Púrpura
314 7709729 - 315 8942140: Sisma Mujer
123: línea de emergencia
122: Fiscalía
