La emergencia por licor adulterado que golpea a Barranquilla ya deja 11 personas muertas y al menos 14 hospitalizadas, la mayoría en unidades de cuidados intensivos. Las autoridades confirmaron este jueves que la bebida que consumieron decenas de personas en el sector de El Boliche contenía metanol, una sustancia altamente tóxica que, mezclada con otros tipos de alcohol e incluso agua, desencadenó la tragedia.
En un Puesto de Mando Unificado (PMU) instalado en el Comando de la Policía Metropolitana, la secretaria de Salud, Stephanie Araujo, explicó que los análisis de laboratorio revelaron la presencia de este químico en los organismos de un fallecido y de un paciente que permanece en estado crítico. “El metanol es una sustancia que puede causar alteración del estado de conciencia, convulsiones, coma e incluso la muerte”, señaló la funcionaria.
Emergencia en Barranquilla por licor adulterado: 11 personas murieron y 14 siguen en hospitales
De acuerdo con la investigación, al menos 25 personas habrían ingerido la mezcla, preparada de forma clandestina a partir de alcohol industrial diluido en agua y vendida en el centro de la ciudad por precios entre 2.000 y 3.000 pesos. Muchas de las víctimas eran trabajadores de la zona que acudían a este producto como alternativa de bajo costo para embriagarse.
La funcionaria agregó que no se descarta la interacción del metanol con otros tipos de alcohol, como el etílico, que en condiciones específicas puede actuar como antagonista, aunque la concentración de metanol hallada sería suficiente para explicar los efectos fatales.
La lista de víctimas mortales incluye a Nicolás Manuel Medrano, Helmot Enrique Escolar, José Felipe Crespo Ortiz, Emiro Alberto Miranda, Víctor Antonio Vargas, Ever Miranda Orozco, Pedro Pablo Caraballo, además de dos mujeres aún sin identificar y un hombre conocido como ‘El Zombie’. Varios de ellos fallecieron en vía pública o en residencias de barrios como Rebolo y San Roque, evidenciando la magnitud del consumo.
El último deceso reportado fue el de un hombre que ingresó en la noche del miércoles al Hospital de Barranquilla tras ser encontrado inconsciente en la calle 30 con carrera 44. Minutos más tarde se confirmó también la muerte de Pedro Pablo Caraballo, quien permanecía en UCI.
Actualmente, 10 personas siguen en estado crítico bajo vigilancia médica, mientras que otras permanecen en observación. Una más ya fue dada de alta, aunque se investiga si su caso está asociado a esta intoxicación masiva.
Las autoridades locales mantienen activo el PMU hasta el próximo lunes, con el fin de coordinar las acciones de salud pública, control y judicialización frente a la producción y comercialización de esta bebida adulterada que ha puesto en alerta máxima a la ciudad.
La tragedia pone de nuevo en evidencia los riesgos del consumo de alcohol no apto para humanos, una práctica que, además de ilegal, puede tener consecuencias fatales inmediatas, como la registrada esta semana en la capital del Atlántico.

