En respuesta a la preocupante disminución de la tasa de natalidad en Colombia, la precandidata presidencial Vicky Dávila ha propuesto una medida económica disruptiva: que el Estado entregue un millón de pesos a cada niño que nazca en el país. Este monto se depositaría en una cuenta de ahorro individual, destinada a generar rendimientos hasta que el beneficiario cumpla 18 años.
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Dávila fundamenta su propuesta en datos recientes que muestran una caída significativa en la tasa de nacimientos. Según cifras del Banco Popular, el promedio de hijos por mujer ha descendido de 2,5 hace 25 años a 1,6 en la actualidad. Además, se proyecta que en 35 años, uno de cada dos colombianos tendrá más de 50 años, lo que plantea desafíos demográficos y económicos para el país .
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La iniciativa también contempla que los padres puedan aportar hasta cinco millones de pesos anuales a esta cuenta, con beneficios fiscales al ser deducibles de impuestos. Los fondos podrían invertirse en instrumentos financieros nacionales, como acciones en la Bolsa de Valores de Colombia, permitiendo que los niños acumulen un capital significativo para su educación o emprendimientos futuros.
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Dávila estima que el costo anual de este programa sería de aproximadamente 500 mil millones de pesos, lo que representa menos del 0,1% del presupuesto nacional. Argumenta que esta inversión es preferible a los recursos que se pierden por corrupción y que fomentaría una cultura de ahorro y responsabilidad financiera desde temprana edad.
Perfil de la precandidata y reacciones a su propuesta
Vicky Dávila, reconocida periodista colombiana, anunció su precandidatura presidencial con una plataforma centrada en la lucha contra la corrupción, la eficiencia del gasto público y la promoción de valores capitalistas. Su propuesta de incentivo al ahorro infantil ha generado diversas reacciones. Mientras algunos sectores la ven como una medida innovadora para enfrentar el envejecimiento poblacional, otros la critican por considerarla populista o inviable fiscalmente.
La precandidata ha defendido su iniciativa como una forma de empoderar a las nuevas generaciones y asegurarles un futuro financiero más estable. Ha señalado que, al fomentar el ahorro y la inversión desde el nacimiento, se puede construir una sociedad más equitativa y con mayores oportunidades para todos.
