Por medio de un boletín de prensa publicado por la Fiscalía General de la Nación en la mañana de este domingo 18 de mayo, se conocieron las condenas de tres integrantes de la banda delincuencial ‘El Mesa’ por el asesinato de siete personas en sector conocido como Alto del Perro, en Rionegro, Antioquia.
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Entre tanto, se conoció que las condenas fueron producto de varios preacuerdos suscritos por la Fiscalía con los tres sujetos que participaron en el ataque armado que también dejó otras dos personas heridas en junio de 2025.
Según el ente investigador, varios jueces penales especializados decidieron avalar las negociaciones judiciales a las que llegaron y condenaron a los tres señalados integrantes del grupo criminal a distintas penas.
Para empezar, mencionaron a Fredis Jesús Borja Guerra, quien fue sentenciado a 25 años de prisión por los delitos de homicidio, tentativa de homicidio, concierto para delinquir, fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos, y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones agravado. Vale decir que todas las conductas agravadas.
Entre tanto, se conoció que Felipe Osorio Álvarez y María Camila Rendón de León a 23 años de cárcel por los delitos de homicidio agravado, tentativa de homicidio, fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos; y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
“Las pruebas recopiladas por un fiscal de la Dirección de Apoyo Territorial dan cuenta de que los hoy sentenciados se reunieron en la residencia de Rendón de León para planificar el asesinato de un grupo de hombres que había llegado a la región proveniente de la Costa Atlántica”, sostuvo la Fiscalía.
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Con lo que el ente investigador calificó como “roles plenamente definidos”, Borja Guerra y Osorio Álvarez se trasladaron junto a otros tres integrantes del grupo delincuencial a la finca en la cual se estaban hospedando las víctimas de la masacre.
Una vez llegaron allí, tumbaron la puerta, identificaron a varias personas y les empezaron a disparar.
