En un nuevo episodio del conflicto armado que azota al suroccidente colombiano, un civil falleció y cinco militares resultaron heridos tras un ataque con artefactos explosivos improvisados en la vía que comunica los municipios de El Peñón con Los Andes Sotomayor, en el departamento de Nariño. El hecho ocurrió a la altura del corregimiento Las Cochas, mientras unidades de ingenieros militares de la Brigada 23 del Ejército Nacional adelantaban labores de mantenimiento vial.
PUBLICIDAD
Según el comunicado oficial del Ejército, los explosivos fueron instalados de manera premeditada y habrían sido activados al paso del vehículo institucional en el que se desplazaban los uniformados. El ataque es atribuido a presuntos integrantes de la estructura Franco Benavides, perteneciente al Bloque Occidental Jacobo Arenas, una disidencia de las FARC que opera en la región.
Le puede interesar: “Un pacto de caballeros”, Juan Fernando Quintero reveló uno de los tratos que tuvo que hacer para llegar al América de Cali
Las víctimas realizaban tareas orientadas a mejorar las condiciones de movilidad para las comunidades locales, cuando fueron sorprendidas por la explosión. El civil afectado, que se desplazaba en motocicleta por el sector, falleció mientras era trasladado a un centro médico, mientras que los cinco militares heridos reciben atención especializada.
El Ejército Nacional rechazó “de manera contundente este acto terrorista que vulnera los derechos de la población civil y atenta contra la integridad de nuestros soldados, quienes trabajan por el desarrollo y bienestar del suroccidente colombiano”. Además, anunció que se están desarrollando operaciones militares en la zona para ubicar a los responsables y llevarlos ante la justicia.
Este atentado se produce en un contexto de creciente violencia en Nariño, donde según la Defensoría del Pueblo, el 73% de los municipios están bajo la influencia de grupos armados ilegales como disidencias de las FARC, el ELN y otras bandas criminales que se disputan rutas de narcotráfico y control territorial. A pesar de los avances en el proceso de “paz total” promovido por el gobierno del presidente Gustavo Petro, la región sigue siendo epicentro de ataques, desplazamientos y violaciones a los derechos humanos.
Lea también: “El diablo está en los detalles”: Panelista de Blu sobre consulta laboral de Petro
Las autoridades han reforzado la presencia militar en el área y continúan evaluando la situación del personal afectado, al tiempo que piden colaboración ciudadana para esclarecer los hechos y garantizar la seguridad de las comunidades.
