El incremento en los niveles de los ríos y las lluvias ha generado una crisis en varios municipios del noroccidente colombiano. Así lo dejó entrever la Defensoría del Pueblo a través de un comunicado de prensa. Allí, les pide a distintas entidades atender la situación que viven algunas poblaciones a raíz de las dificultades que atraviesan por el crecimiento de los ríos Sinú y San Jorge.
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“En razón a que la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y del San Jorge (CVS) decretó la alerta roja para las cuencas media y baja del río Sinú, la Defensoría del Pueblo llama a los entes competentes a aunar esfuerzos para que atiendan las recomendaciones en materia ambiental y de gestión del riesgo”, indicó el Ministerio Público.
Entre otras cosas, aseveró que tanto en el río Sinú como el San Jorge han incrementado su caudal debido a las lluvias reportadas en las últimas semanas. Esta situación ha amenazado el bienestar de algunos municipios cordobeses como Tierralta, San Pelayo y Montería.
Así mismo, la entidad indicó que ya se han registrado inundaciones en otros municipios del departamento como Montelíbano, Ayapel, La Apartada y Puerto Libertador. Y advirtió que en el municipio de Lorica se declaró la calamidad pública por cuenta de la ola de lluvias que está enfrentando.
Por estas razones, la Defensoría les pidió a los ministerios de Ambiente y Vivienda, a la Gobernación de Córdoba y a las alcaldías locales implementar acciones para gestionar el riesgo que afecta a las comunidades en esta zona del país.
“Como miembros del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, la finalidad es que eviten o atiendan los desastres naturales que puedan ser originados por el recrudecimiento de la temporada invernal, sin esperar a que ocurra una tragedia”, concluyó la Defensoría del Pueblo.
Estas alertas se suman a la difícil situación que están atravesando los municipios de la subregión de La Mojana debido al nuevo desbordamiento del río Cauca. Si bien se habían hecho obras para fortalecer el dique en el sector de Caregato, estas no fueron suficientes para contener las aguas.
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“El Gobierno tiene que atender la calamidad de todas las personas afectadas. Llegarles con ayudas, con mercados, con frazadas. Y debe mirar la cuestión de los cultivos. Tratar de controlar las deudas que tienen en los bancos”, le dijo a PUBLIMETRO Pedro Almanza, un líder social de San Jacinto del Cauca, uno de los municipios aledaños al río Cauca.
También indicó que el Gobierno tiene responsabilidad por lo ocurrido debido a que no consiguió tapar adecuadamente el boquete que se generó en el sector de Caregato, donde ya se había desbordado el río Cauca en 2021, lo cual provocó una crisis humanitaria.
“Sobre la cuestión de Caregato, deben traer a una empresa responsable que venga a trabajar de otra forma”, agregó y pidió que se reanuden las obras para tapar el boquete.
El pedido de la Procuraduría
Ante los pronósticos del advenimiento del Fenómeno de La Niña y la temporada de huracanes, la Procuraduría ya se había pronunciado a través de un boletín de prensa. Entre otras cosas, informó que emitió una circular advirtiendo los impactos que podría tener esta nueva ola de lluvias.
“A través de la Directiva 04 de 2024, el Ministerio Público exhortó al Gobierno Nacional y a las autoridades competentes, a ejecutar las acciones para la prevención, preparación, monitoreo, mitigación, alistamiento, atención y recuperación de desastres, manejo de emergencias y reducción de riesgos previstos para los fenómenos climáticos del 2024, que amenazan con inundaciones, creciente súbita, movimientos en masa, avenidas torrenciales, fuertes vientos, tormentas tropicales y huracanes en la región caribe del país”, indicó el Ministerio Público.
Y subrayó que, de acuerdo con el Ideam, se prevé que el fenómeno de La Niña se consolide entre junio y agosto. Luego, podría aumentar “progresivamente” de cara al último trimestre del presente año. Las regiones más afectadas por las lluvias serían el Caribe, la Orinoquía y la Amazonía.
