La ciudad de Santa Marta se levanta este domigno 16 de julio entre la zozobra y la angustia por la muerte de Érick Alberto Melo Solano, de 24 años y posteriores disturbios causados por un grupo de ciudadanos airados por lo ocurrido. Le contamos los detalles de esta delicada situación de orden público que se vive en la capital del Magdalena.
PUBLICIDAD
Todo ocurrió el pasado sábado 15 de julio cuando un policía tuvo un enfrentamiento con el joven mototaxista Melo, quien terminó luego baleado por el uniformado, específicamente en la Calle 22 con Carrera 28. Lo que cuentan algunos testigos del hecho es que tras una persecución el joven murió tras disparos del policía. Al parecer el joven no se habría detenido ante la orden del uniformado y este lo que hizo fue reaccionar con su arma de dotación.
Lea también: Renta Ciudadana: Banco Agrario tendrá horario extendido este 15 y 16 de julio para entregar subsidio
El mototaxista, luego de ser baleado, alcanzó a rodar unos metros y terminó chocando contra un vehículo particular. Tras activar el traslado del hombre a un centro médico, este llegó a la clínica Mar Caribe, en donde no pudieron salvarle la vida al joven.
A las afueras de este centro de salud se hicieron amigos y familiares del joven mototaxistas y al enterarse de su muerte, frente a la URI de la Fiscalía de Santa Marta, lo que comenzó con un plantón pacífico luego se convirtió en enfrentamientos con la fuerza pública.
El hermano del mototaxista estuvo en en el lugar donde comenzó la protesta, reclamando a la justicia que aclare los hechos que se desataron en este lugar de la ciudad. Los manifestantes comenzaron a lanzar piedras y palos contra uniformados de la Policía y además una moto de esta institución fue incinerada por ellos.
Le puede interesar: Ojo: solicitud del pasaporte cambiará de condiciones por esta nueva medida de la Cancillería
PUBLICIDAD
Quienes se manifiestan reclaman a la Policía rendición de cuentas por su acción policial en el caso del joven mototaxista, pues aseguran que “era un joven de bien”. Un caso parecido se presentó hace menos de un mes, según un veedor ciudadano de Barranquilla entrevistado por Última Hora Santa Marta. El caso no se ha podido esclarecer porque las cámaras son privadas y no se ha logrado que sean entregadas por el privado que posee los videos.
La Policía de Santa Marta destacó que los hechos se presentaron en medio de un “procedimiento de control”. Los uniformados involucrados en este caso fueron separados de sus cargos mientras se investiga. Se conoce que las zonas más complicadas de la ciudad fueron militarizadas por la fuerza pública para evitar mayores desmanes por parte de los motociclistas.
