La semana pasada ocurrió un incendio en el antiguo Polideportivo de la ciudad de Santa Marta, en el lugar se encontraba un refugio con aproximadamente 50 gaticos. Tras el reporte del hecho por parte de la ciudadanía en las redes sociales, las autoridades se comprometieron a investigar lo que había sucedido y así encontrar los culpables.
PUBLICIDAD
Por el momento, Alejandro Gaviria, fiscal coordinador del grupo Gelma de la Fiscalía, en una entrevista con Caracol Televisión, relató que las investigaciones no han logrado esclarecer bien los hechos porque en el Polideportivo no existen cámaras cercanas que les permitieran observar lo sucedido.
Lea también: ¡Indignante! Queman vivos a por lo menos 50 gaticos en Santa Marta
¿En qué va la investigación?
La información que se tiene hasta el momento es que según el fiscal “No fue una explosión, si hubo manos involucradas en la quema de los gaticos, fue un incendio provocado”, esta hipótesis se da porque las autoridades encontraron combustible alrededor de la caseta donde se encontraban los animales, también se sabe que de los 20 felinos rescatados 5 no lograron sobrevivir.
Además de la investigación, Gaviria afirma que es necesaria la intervención por parte del Estado. “El Estado debería tomar acciones, la protección animal es una cadena que contiene diversos actores”, también el Fiscal asegura que es una situación que se podía haber prevenido porque en Santa Marta hace mucho tiempo se sabe lo que está pasando con los animales, pero existe un desinterés por parte del Estado.
Lea también: Encontraron a pareja de adultos mayores degollada en una finca
¿Qué es lo que pasa en Santa Marta?
En la capital del departamento de Magdalena pasa una situación bastante compleja para los animales y es que según la Veeduría de Bienestar Animal de Santa Marta (VPAS) en la ciudad existe una sobrepoblación de animales en condición de calle y que por tal motivo existen “botaderos” donde ya es normal que la ciudadanía abandone a los gaticos o a los perritos.
Según esta organización, el problema también radica en que las autoridades no han cumplido con las promesas de realizar un censo para determinar las condiciones de la población animal, las jornadas de esterilización y brindar las condiciones necesarias para atender las emergencias que se presentan con los animales.