Tras los anuncios de varias ayudas que el Gobierno Nacional enviará a esta comunidad de emberas que permanecen en Bogotá y que ayer protagonizaron fuertes disturbios y ataques contra la fuerza pública, la alcaldesa Claudia López se pronunció.
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Se trató de una protesta en el centro de Bogotá de indígenas emberas desplazados por el conflicto, que reclaman atención y una mejora de sus condiciones de vida. Pero el hecho derivó en fuertes disturbios con la Policía y un saldo de 27 heridos, según reportaron las autoridades distritales.
La alcaldesa, luego del pronunciamiento del mandatario, le agradeció al presidente Gustavo Petro que “al fin asuma” su responsabilidad, pues es obligación del Estado evitar los desplazamientos.
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“Bogotá ha aportado $9.000 millones en albergues, atención humanitaria, de salud, educación y alimentación de la población embera por 2 años. Es responsabilidad del gobierno nacional evitar el desplazamiento y garantizar el retorno. Agradecemos al Presidente que al fin se asuma”, dijo este jueves en su Twitter.
Luego agregó que la capital también “ha ofrecido varios albergues. El único aceptado por políticos indígenas Bakata fue La Rioja a sabiendas que no era el más adecuado. Lo usan como presión. La real solución digna y protectora de los derechos ancestrales y humanos indígenas es garantizar el retorno seguro”.
Y dijo que, “como también le debió informar la Unidad de Víctimas”, varios hombres “líderes” emberas “explotan en mendicidad a mujeres y niños, mientras se gastan las ayudas que les damos en licor y ejercen violencia contra su propia comunidad, ciudadanos y servidores públicos”.
