El Congreso dio luz verde ayer al Presupuesto General de la Nación presentado por el Gobierno para el 2023 por un valor de 405,6 billones de pesos, una cifra 15,1 % superior al último presupuesto, con énfasis en “la transición energética y la búsqueda de la paz total”.
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El Gobierno, tras la aprobación mayoritaria en el Congreso, señaló que se trata de un “paso fundamental en el cumplimiento de sus objetivos de la paz total y la justicia social, ambiental y económica”.
Para el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, el presupuesto para 2023 “es la carta de navegación financiera del Gobierno del Cambio para el próximo año frente a los retos que plantea la pospandemia”.
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Además, se ejecutará, según aparece citado en un comunicado de Presidencia, “en un entorno internacional complejo, caracterizado por la inflación mundial, la desaceleración económica, las elevadas tasas de interés, y el freno al riesgo financiero hacia las economías emergentes”.
Ocampo insistió en que se priorizará la inversión social y que con esta mayor inversión “la política fiscal ayudará a fortalecer la resistencia de la economía colombiana frente a la adversidad internacional, mediante la expansión y diversificación de las cadenas de producción y de suministro, en línea con la transición energética y la búsqueda de la paz total”.
Pese a su aprobación por mayoría en el Congreso, algunos senadores de la oposición criticaron que en los debates no se cuestionara ni un solo punto del proyecto y que el ministro de Hacienda no dijera una sola palabra.
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“Esta es la primera vez que veo que aprueban un presupuesto sin que el MinHacienda siquiera hable. No contestaron preguntas ni dieron explicaciones. La verdadera aplanadora”, dijo la senadora Paloma Valencia.
Sectores con más recursos
En total se aprobaron 253,6 billones de pesos para funcionamiento, 77,9 billones de pesos al pago del servicio de la deuda y 74,2 billones de pesos para inversión, lo que supone un 6,3 % más que en 2022 y es una cifra más alta que la proyectada inicialmente.
En cuanto a los gastos de funcionamiento aprobados, es una cifra un 20,1 % superior que en la actual vigencia, un incremento que se justifica por los recursos destinados a reducir el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles, para lo cual se destinará el 1,3 % del PIB el próximo año.
Los sectores que tendrán más recursos, descontando la deuda pública, serán educación (54,8 billones de pesos); salud y protección social (50,2 billones de pesos); hacienda (48,7 billones de pesos); defensa y policía (48,3 billones de pesos); trabajo (37,9 billones de pesos) e inclusión social y reconciliación (17,8 billones de pesos).