Por las viudas, huérfanos y víctimas en general de la extorsión, las tiendas de Barranquilla cerraron hoy.
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Las condiciones de presiones y amenazas a los comerciantes se han mantenido y la paciencia de los comerciantes venció.
Sostienen que el empleo se afecta porque no se da la oportunidad de generar más trabajos.
Advierten que el campo de trabajo se va reduciendo para los comerciantes.
En la marcha, a la altura de la carrera 44, entre calles 38 y 44, se escuchó un minuto de silencio y luego un sonoro aplauso.
El sonido de las vuvuzelas se hizo más fuerte y el coro: “No más extorsión”, se hizo más fuerte.
Además de Undeco, otros gremios como Asocentro y Asaba, se sumaron a la protesta. Por eso, el comercio en el centro cerró totalmente sus puertas al público este jueves.
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Estima el gremio de pequeños comerciantes que por miedo a estas intimidaciones, son cerca de 50 las tiendas que han cerrado en el último año por la presión de bandas criminales.
Tenderos de cinco barrios del suroriente, suroccidente y Centro son las mayores víctimas de este flagelo. En los barrios de San Roque, Chiquinquirá, Rebolo, Montes, Simón Bolívar, La Victoria, entre otros, concentran el mayor número de denuncias.
