Después de la victoria colombiana del domingo con Járlinson Pantano (IAM Cycling), las esperanzas de una victoria con Nairo Quintana volvieron a revivirse en la afición del ciclismo nacional, aunque lo principal es tener cerca y atacar en el momento indicado a Chris Froome (Team Sky), quien mantiene la diferencia con sus perseguidores y hasta ahora no ha dado ventajas.
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Al final se impuso Peter Sagan (Tinkoff) por tercera vez en esta edición 103 del Tour, con un remate muy cerrado sobre la línea de meta con un tiempo de 4 horas y 26 minutos y 2 segundos. Nairo estuvo presente en esta lucha con los expertos rematadores, al igual que Froome y los otros favoritos.
El día 16 con llegada a Suiza
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La salida fue desde Moirans-en-Motagne con un grupo sólido y unido, por lo menos hasta llegar al primer cuarto del recorrido, después hubo una división en el grupo y los únicos que conservaron la diferencia que sacaron fueron Julian Alaphilippe y Tony Martin (Etixx-Quick Step), ellos llegaron a tener 6 minutos de diferencia respecto del lote de favoritos, sin embargo con el pasar de los kilómetros esta ventaja se fue reduciendo.
A poco más de 20 kilómetros para cruzar meta, como se preveía, se dio finalmente la caza del gran grupo a los dos compañeros de equipo quienes dieron la lucha pero no pudieron configurar una fuga exitosa, Martin fue quien más lo intentó pero los ambiciosos y trabajadores gregarios frustraron al alemán. Y quien logró sacar ventaja de esto fue el portugués Rui Faria da Costa (Lampre-Merida), que se adelantó al pelotón unos cuantos metros y entró a los últimos 10.000 metros como líder parcial del día y estirando al máximo al gran lote que lo perseguía.
La llegada no fue nada fácil, con un tramo del famoso y complicado pavé los pedalistas tuvieron que prepararse para que el terreno se pusiera más duro, complicado y que el impulso que se traía en el largo recorrido se viera mermado en los últimos kilómetros, además por que este sector era muy angosto y con curvas muy cerradas.
La gran emoción se guardó hasta el último pedalazo, con el cual Peter Sagan ganó una etapa más en este Tour de Francia 2016, demostrando su fortaleza en los sprints y además dejando un punto muy alto en la lucha por la camiseta verde que porta hace varios días y lo distingue como el mejor de la clasificación por puntos.
Los llamados a ganar el Tour también estuvieron en esa definición milimétrica y se conservaron las diferencias para que después de este martes de descanso, se luche en la cronoescalada y en los Alpes el dueño de la camiseta amarilla por el próximo año.
EN DESARROLLO…
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Pub/RM