Manchester City fue una máquina de jugar fútbol y ante el PSG lo hizo casi todo perfecto. La magia del tridente Messi, Neymar y Mbappé apagó la maquinaria, pero respondieron con una sinfonía.
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El dominio de la mayor parte del juego fue para los dirigidos por Pep Guardiola que literalmente arrollaron a los franceses y se les fueron de cabeza a sus predios logrando generar múltiples ocasiones de gol.
Entre Keylor Navas, Hakimi, Marquinhos y hasta el palo hacían de tripas corazón para aguantar esa embestida.
Messi, Neymar y Mbappé prendieron la lampara
Las tres grandes figuras de PSG se juntaron y desconectaron a su imponente rival.
Sobre el minuto 50, el propio Lionel Messi comenzó a gestar la jugada desde la media cancha, tocó con Neymar, luego la abrieron hasta que se la tocaron en ataque nuevamente al argentino, con Neymar apareciendo para dejar pasar el balón entre sus piernas. Leo la cruzó al otro costado en donde apareció libre de marca Kylian Mbappé para sacar un zapatazo y abrir el marcador.
Enfadaron a la bestia
Esa anotación parecía ser un golpe letal para el City, sin embargo, el conjunto inglés se sacudió y volvió a ir por su presa. En esta ocasión, herido y con una ofensa recibida, no se tuvo contemplaciones y fue a por todo.
Dos tremendas combinaciones colectivas terminaron gestando la remontada de los de Guardiola.
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Primero fue Raheem Sterling el que terminó embocando el balón al fondo de la red (63′) y posteriormente el ingresado Gabriel Jesús capitalizó otra jugada colectiva para poner el 2-1 definitivo.
Mazazo contundente para el París que se sintió ganador, pero fue dominado con contundencia y se quedó relegado al segundo lugar del grupo. El City se aseguró ser cabeza de serie para el sorteo de los octavos de final.