Lionel Messi y Kylian Mbappé se inspiraron para darle una nueva victoria al PSG en la Liga de Campeones, en esta ocasión 3-2 ante el Leipzig.

Fue un juego en el que los parisinos acudieron a sus individualidades que supieron salvar lo que se estaba complicando en lo colectivo.

Un indetenible Mbappé

La ventaja para el PSG se gestó de una manera casi impensada, con Lionel Messi en el rol de recuperador, al borde de su propia área.

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El argentino fue en busca de un rival y Leipzig se quedó protestando una posible falta. La pelota le quedó a Marquinhos que salió con Julián Draxler y este se la cedió a Kylian Mbappé que avanzó en velocidad, ante el defensor que lo aguantó, gambeteó y sacó un remate potente que fue imposible para el portero rival.

Leipzig de extremo a extremo

La igualdad para la visita se dio sobre los 28 minutos en una jugada que tejieron de banda a banda. André Silva la corrió por derecha, pasó al medio, le quedó a Angelinho por izquierda y el español la devolvió de nuevo al costado derecho en donde Silva llegó para enviarla al fondo de la red.

Y como Leipzig venía de lado a lado, también lo hizo en el marcador. Salida rápida, nuevamente con Angelinho como asistidor con un preciso centro al área que aprovechó de gran manera Mukiele para silenciar a todo el estadio con el 1-2 parcial.

Messi, el salvador

Una recuperación de Hakimi sirvió para que Mbappé se volviera a lucir en velocidad y se la cediera a Messi. El argentino remató frente al portero Gulácsi, que alcanzó a rozar el balón contra el palo, y el rebote fue empujado por el propio argentino sobre la línea de gol (67′).

Sobre el minuto 73, nuevamente la posibilidad de la ventaja para los dueños de casa. Mohamed Simakan se pasó de bríos y frenó de un empujón en el área a Mbappé y el árbitro sentenció el penal.

Al cobro vino el de siempre, Lionel Messi que la pinchó con toda su clase para volver a poner en ventaja a los suyos.

Al minuto 93 llegó otro penal para PSG. Falta de Gvardiol sobre Hakimi que el VAR no dejó pasar, aunque el juez sí. En esta ocasión Messi se la cedió a Mbappé y el joven francés la envió a las nubes.

Con Mbappé como generador y Messi como definidor, los dirigidos por Mauricio Pochettino sumaron tres puntos más que los dejan en la punta del grupo A con 7 puntos, uno más que Manchester City.