Con el paso de los años hemos visto cada vez más preocupación a nivel mundial por el cuidado y preservación del medio ambiente. Con el fin de buscar herramientas que permitan hacerles frente a las diferentes problemáticas que giran alrededor de esta temática, las tecnologías emergentes dentro de la Ingeniería Ambiental han permitido optimizar e incluso mejorar el desempeño en procesos tradicionales.
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Sin embargo, aunque las tecnologías emergentes pueden ser aplicables dentro de las ingenierías actuales, aún hacen falta elementos para poder implementarlas en una escala real.
Wilmar A. Botello Suárez, PhD y profesor asociado del programa de Ingeniería Ambiental de la Universidad El Bosque, explicó a PUBLIMETRO que estas tecnologías se encuentran en etapa inicial de desarrollo y su implementación depende de la complejidad técnica, pruebas de evaluación y validación, requisitos regulatorios e incluso aspectos éticos y sociales. Aun así, algunas áreas pueden beneficiarse con el desarrollo de las tecnologías existentes en este campo de la Ingeniería.
Innovación y desarrollo
Las tecnologías emergentes dentro de la Ingeniería Ambiental contribuyen a minimizar riesgos y monitorearlos de forma más precisa y continua. Por ejemplo, a través de sensores y dispositivos avanzados, se recopilan datos detallados sobre la calidad del aire, del agua y otros parámetros ambientales. Esto permite identificar fuentes de contaminación, evaluar su impacto y tomar medidas correctivas oportunas para proteger los ecosistemas.
“Las tecnologías emergentes pueden contribuir a la promoción de la sostenibilidad al abordar los desafíos ambientales actuales. En primer lugar, contribuyen a la reducción de la huella ambiental, aplicando enfoques más eficientes en la generación, uso de recursos y reúso de residuos y subproductos derivados de actividades industriales. Adicionalmente, se están investigando sistemas para mejorar el rendimiento de procesos de obtención de energía renovable como la energía solar y eólica, que sustituyen a los combustibles fósiles y reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, contrarrestando así el cambio climático”, aseguró el profesional.
Por otra parte, las tecnologías emergentes impulsan la innovación en diversos sectores. “Esto se traduce en soluciones más sostenibles en áreas como la agricultura, movilidad, industria y gestión de recursos hídricos. Por tanto, la adopción de estas ciencias es esencial para el desarrollo de innovaciones, ya que fomentan la transición hacia un modelo de desarrollo más sustentable y resiliente”, explicó el docente.
El papel de los profesionales en Ingeniería Ambiental
Debido a los grandes retos que traen consigo las tecnologías emergentes, cada vez son más los profesionales que buscan prepararse para los desafíos que estas generan a futuro. En el caso de la Universidad El Bosque, el diseño, evaluación y desarrollo de tecnologías emergentes constituyen aspectos prioritarios dentro de su formación, con especial énfasis en la resolución de problemáticas ambientales en un contexto social.
“Esto es especialmente relevante considerando que muchos de los procesos relacionados con las ciencias ambientales aún no han alcanzado un nivel de conocimiento consolidado. Conscientes de esta realidad, la universidad busca formar ingenieros capaces de adaptarse a los continuos cambios y de integrar sus competencias con otros profesionales, promoviendo así una mejora continua en su formación. En efecto, con la formación brindada se asegura que los estudiantes estén preparados para enfrentar los retos del mercado laboral. Esto puede incluir la incorporación de nuevas tecnologías, enfoques innovadores y la promoción de la sostenibilidad”, agregó Botello.
6 grandes avances en tecnologías emergentes
1. Tratamiento y purificación de aguas. Se están desarrollando tecnologías innovadoras que ofrecen mejoras de eficiencia y economía energética, como sistemas de membranas avanzadas y tecnologías de desalinización.
2. Gestión de residuos. Se han buscado implementar tecnologías inteligentes para la gestión eficiente de residuos, como sistemas de clasificación automatizada de residuos, tecnologías de reciclaje más avanzadas, sistemas de recolección inteligentes y aplicaciones móviles para la participación ciudadana en la gestión de desechos.
3. Monitoreo. Se están desarrollando y validando tecnologías de monitoreo avanzadas que utilizan sensores para recopilar datos sobre diversos parámetros ambientales, como la calidad del aire, el agua, la contaminación acústica y la radiación.
4. Construcción sostenible. Se están impulsando avances en el desarrollo de materiales ecoamigables y prácticas de construcción más respetuosas con el medio ambiente.
5. Energías renovables. Se han desarrollado tecnologías emergentes como la energía solar, eólica offshore, geotérmica, biomasa y biogás.
6. Gestión inteligente de energía. Son tecnologías de control y monitoreo avanzadas para optimizar la eficiencia energética en edificios, industrias y redes eléctricas.