Como «cinematográfica» fue catalogada la fuga de la exsenadora Aída Merlano, condenada por la Corte Suprema a 15 años de cárcel por la compra de votos a su campaña política al Senado de la República en el 2018. Pero hablemos de las personas que rodean a esta mujer que pasó de ser “mochilera” a convertirse en una pieza clave en la política colombiana.
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Merlano fue apadrinada por dos de las casa políticas más importantes, LOS CHAR y los GERLEIN, pero esto va más allá, pues una mujer humilde terminó siendo acompañada por senadores, concejales, diputados y hasta parapolíticos. Pero demos los nombres de quienes acompañan a esta impoluta pero fugada condenada senadora:
Arturo Char, Alejandro Char, Julio Gerlein, Roberto Gerlein, Jorge Rangel (del Partido Conservador), Adalberto Llinás (del Conservador), Juan Carlos Zamora (Conservador), Jorge Mejía (del Partido Verde), Ernesto Montes (Conservador), William Montes (exsenador condenado por Parapolítica), Margarita Belén (diputada), Lilibeth Llinás, Vicente Támara, Carlos Rojano (Concejal), Laureano Acuña (exsenador), José Manzanera, Ana Niebles, Yahaira Calle (encargada de los pagos), Adriana Blanco (coordinadora de la campaña), Carolina Díaz (asesora), Jefferson Violoria (asesor), Rafael Martínez (asesor), Vannesa Merlano (hermana), María Valencia (manejaba redes sociales), Elvis Briceño (exconcejal) y Aissar Castro (concejal de Cambio Radical).
Con lujos y privilegios dentro de la cárcel el Buen Pastor, Merlano se consideró como la de las buenas fiestas dentro del centro carcelario, pero esta historia daría un rumbo diferente luego de lo que serían unas aparentes amenazas a su vida y la de su familia, justo el día que debía rendir su declaratoria en la Fiscalía General de la Nación.
El primero de octubre a las 10:44, los hijos de la condenada ingresaron al centro odontológico al norte de Bogotá, a las 11:23 ingresa Merlano a cumplir su aparente cita, sobre la 1:44 pm ingresa al consultorio el Mauricio Arango, amigo personal de ella y, además, dueño del consultorio odontológico, y siendo las 2:50 pm, según registro de las cámaras, con una cuerda, se fuga del tercer piso de esa entidad la exsenadora, se desliza y luego se embarca en una moto, la cual la saca del sector.
Pero esto tiene más de fondo que de forma, el cura Hoyos, amigo de la excongresista, leyó una carta que supuestamente ella misma le envió, donde le confiesa que ella y su familia habían recibido amenazas de muerte si ella llegaba a ventilar todo lo que sabía respecto a la movida política en la Costa. Según lo leído por Hoyos, es necesario investigar las actuaciones del actual alcalde de Barranquilla, Alex Char, quien al parecer usó una empresa para pagar favores políticos, además, valga recordar, que Char estaría implicado en el caso Odebrecht, al recibir al parecer dineros para financiar su campaña política a la Alcaldía.
Lo que queda claro es que si Aída Merlano llega hablar, la política en la Costa se cae por completo, ya que salpica a las dos casas políticas más importantes en la región y no solo eso, en caso de que lo haga, es más claro que querrán acabar con su vida y la de su familia.
Y por último, quiero preguntar al señor Germán Vargas Lleras: ¿qué relación tiene usted con todo este escándalo, siendo usted la cabeza de Cambio Radical y súper amigo de los Char?