Sin importar desde donde lo observemos, ya sea desde el punto de vista financiero, intelectual o emocional, todos quisiéramos llegar a tener éxito, o sentir que vivimos una vida plena. Pero no hay éxito sin sacrificio, y no es que lograr nuestras metas o felicidad deba ser un camino de tortura y amargura para una breve recompensa, pero claramente no hay manera de alcanzar un éxito duradero si no convertimos cada error que cometemos o cada “fracaso” que tenemos en una lección; es decir, solo cuando aprendemos a transformar esos errores en lecciones y las aplicamos a nuestra vida, logramos que ese mal momento se convierta en un éxito, por eso hoy te comparto estas cinco cosas que en general podemos aprender de nuestros errores:
1. NO SIEMPRE SE TRATA DE GANAR
Tras un problema la mayoría de personas se enfocan en encontrar culpables y resaltar abiertamente todo lo que desde un principio se hizo mal, buscando con esto establecer una posición de poder ante dicha situación. Aunque puede ser una reacción normal o casi un reflejo, este tipo de comportamiento aleja a todas las partes de cualquier solución, ya que se convierte en una competencia sobre quién puede ganar o quién tiene la razón, cuando lo importante es enfocar los esfuerzos en la solución y luego sí tomar los correctivos necesarios. Es preferible no tener la razón y crear una solución, a perderlo todo tras una equivocación.
2. DEJA LAS EXCUSAS
Las excusas no solucionan nada, así como culpar, quejarse, explicar o tomar una posición de verdugo o víctima solo pueden profundizar los problemas y hacer mucho más lejana una solución. Si abandonamos las excusas solo nos queda una opción, que es de hecho la mejor: encontrar una solución que nos lleve a corregir nuestro error.
3. ESCUCHA ABIERTAMENTE, HABLA PACIENTEMENTE
Todos los puntos de vista son válidos, pero cuando enfrentamos un problema solemos pensar que el nuestro es el verdadero, con lo cual podemos perder toda objetividad y perspectiva de lo que vivimos. Cuando el ambiente se vuelve tenso y las cosas se ponen difíciles es vital escuchar sin prejuicios, tratando de entender otros puntos de vista, y claro, hablar con calma y claridad para que no perdamos el norte ni nuestra tranquilidad.
4. ACEPTA TUS ACTOS
Todos cometemos errores y nos equivocamos, y aunque existen claramente errores más graves, dolorosos y profundos que otros, no hay peor error que el no aceptar que nos podemos equivocar. Cuando creemos ser dueños de la verdad absoluta lo único que lograremos es quedar encerrados en nuestra equivocación. Aceptar nuestras equivocaciones nos abre una puerta hacia la posibilidad de mejorar.
5. TRANSFORMA TUS HÁBITOS
Toda acción conlleva una reacción, y así como ciertas acciones pueden conducirnos a cometer errores, lo realmente importante es que cada error nos conduzca al menos a llevar a cabo dos acciones: la primera debe ser tratar de corregir/reparar nuestro error para tener una solución frente a la situación, y la segunda, será aquella que trate de evitar que el error se repita.
Si tras cada error logramos aprender –al menos una– de estas cosas, no solo los errores serán cada vez menos frecuentes, sino que también podremos transformar nuestra vida de una manera significativa a todo nivel.
*Las opiniones expresadas por el columnista no representan necesariamente las de PUBLIMETRO Colombia S.A.S.
