La larga espera por una prueba de coronavirus ha hecho que la situación de la mujer y de miles de personas más en Bogotá sea crítica.
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Jaizuri Bravo, el pasado mes de octubre, se sintió mal, con problemas respiratorios. Desde entonces pidió una prueba de coronavirus a la EPS. Hoy, tres meses después, sigue esperando a que su empresa prestadora de salud le realice la prueba.
Según narró Bravo a Noticias Caracol, la mujer llamó en repetidas oportunidades a la EPS, de la cual no se reveló su identidad. «Me dijeron que se iban a comunicar conmigo y no, insistí muchas veces y no», afirmó.
Ante esta negativa, no le quedó más remedio que aislarse con sus hijas en su casa, sin saber si era portadora del virus y si podía sufrir de la enfermedad. Incluso, también afectó su perspectiva laboral, pues para regresar a su empleo debía tener una prueba de coronavirus negativa que nunca llegó.
Ni siquiera ir a un hospital, poniendo en riesgo su salud, fue suficiente para poder comprobar si tenía el virus. «Me acerqué a urgencias yo sola y me dijeron que como no tenía fiebre tampoco me solucionaban en urgencias«, aseguró.
En varios sitios de Bogotá designados por la Secretaría de Salud se realizan pruebas gratuitas de coronavirus diariamente. Aún así, la Alcaldía recordó que es responsabilidad de las EPS realizar estas pruebas, de las que se analizan hasta 60.000 al día.