El pasado 24 de septiembre se dio uno de los casos más dolorosos para el país y para el estado, que ofició como asesino de Juliana Giraldo.
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En el municipio de Guatemala, en el Cauca, un soldado disparó contra un carro ocasionando la muerte de Juliana Giraldo.
Tras un mes y medio, el caso vuelve a moverse, pues en esta ocasión, la Fiscalía ha pedido que el caso siga en su dependencia y no pase a la justicia militar como muchos quieren.
Pues activistas lgbti han aplaudido la decisión, pues consideran que si el caso pasa a la justicia penal, podría darse impunidad.
«Al respecto, la Fiscalía argumentó que debe seguir con la investigación para otorgar todas las garantías judiciales a la víctima y sus familiares. Precisó que los indicios dan cuenta de que el uniformado involucrado en los hechos actuó a mutuo propio y no en un acto del servicio», aseguró la Fiscalía en un comunicado.
«Adicionalmente, con su proceder habría desatendido los lineamientos definidos por el Ejército Nacional para reaccionar en un puesto de control. La Fiscalía también manifestó que Juliana Giraldo Díaz era una mujer transgénero integrante de la población civil, por lo tanto estaba protegida internacionalmente. Esto indicaría que con su muerte fueron vulnerados los principios de distinción y precaución que contempla el Derecho Internacional Humanitario».
