Existen personas que estarían tomando provecho de la actual situación del país. Mujeres denunciaron que arrendadores les exigen sexo a cambio de no echarlas.
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Durante una protesta en Santa Marta un lamentable caso se hizo público.
Hasta la puerta de la Alcaldía de Santa Marta llegó un grupo de migrantes venezolanos que claman por ayuda para volver a su país de origen.
Las manifestantes aseguraron que ya no cuenta con recursos para sostener su permanencia en Colombia.
Además denunciaron al Diario del Norte ser víctimas de malos tratos y hasta acoso sexual.
Una de las afectadas denunció que existen arrendadores en la ciudad pidiendo favores sexuales a cambio de permitirles permanecer en sus viviendas.
Si no accedían a sus pretensiones las echarían a la calle junto a sus familias.
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Debido a la cuarentena contra la propagación del coronavirus muchas de ellas no han podido salir a trabajar.
Pese a que la Alcaldía de Santa Marta les ha entregado ayudas afirman que se les acabaron los ahorros
Ahora solo viven de la caridad de otras personas para sobrevivir en esta capital.
«Tenemos hijos, tenemos necesidades, no podemos ir al mercado público porque Espacio Público nos tira nuestras carretillas, nuestros termos, soy tintera, tengo una niña de seis años, ayúdenos por favor, nos queremos ir», manifestó una mujer a la alcaldesa Virna Johnson.
Ellas esperan ser escuchadas por el gobierno nacional.
El pasado 14 de mayo una población de venezolanos compuesta por 65 mujeres, 6 embarazadas; 33 niños, 3 adultos mayores y 2 con discapacidad recibieron mercados y tamizaje en salud por parte de la Alcaldía de Santa Marta.
Mujeres denunciaron que arrendadores les exigen sexo a cambio de no echarlas
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